STAY (BP 2)

64. Madre e hija.

Caminamos en silencio durante varios minutos. Siento que mis piernas comienzan a cansarse pero no quiero romper la atmósfera que, con la ausencia de palabras, se ha creado. Ella me mira en silencio y ahí es cuando se decide a romper el hielo.

-¿Quieres sentarte a tomar algo? - Señala una cafetería. La miro y asiento sin saber muy bien que responder. Entramos al interior del local y un olor a café invade mis fosas nasales. Sonrío levemente cuando tomamos asiento. 

Un chico se nos acerca con una libreta y un bolígrafo en sus manos.

-¿Qué desean? - Murmura sin centrar su mirada en nosotras, sólo observando la libreta. Miro a Lina y respondo rápido.

-Un café con leche.

-Otro para mí. 

También nos pregunta si queremos algo de comer. Lina le pregunta por algo típico del local y el camarero nos informa de que traerá dos porciones de su dulce típico. Miro por la ventana y soy consciente de dónde estoy. Una gran cantidad de coches pasa por la carretera, pero a la vez, una gran avenida con parques está repleta de gente paseando. Miro a Lina, que decide ser la primera en hablar.

-¿Qué tal te encuentras?

-Bueno... Poco a poco me voy recuperando, aunque todavía duele - Ella me mira y asiente levemente.

-Me alegro de que estés mejor y ya comiences a recuperar tu vida poco a poco.

-No creo que pueda recuperar mi vida al cien por cien - Las palabras se escapan de mi boca y me arrepiento rápidamente al ver como su cara cambia. Agacha la mirada. "Mierda Nora, deberías callarte" - Yo... Lo siento... Yo no quería decir...

-Te comprendo, no debes disculparte, ¿Cómo he podido pensar que todo esto sería de tu agrado?

-Lina, no quería decir lo que he dicho, simplemente es complicado para mí, todavía no asimilo que hayas llegado aquí después de todo lo que pasé hace dos años... Yo creía que tú estabas muerta y de un día al otro, tengo a mi... madre biológica frente a mí.

-Entiendo que no puedas verme como tu madre-Otro palo. Trago saliva levemente al escucharla hablar y notar como su voz se retuerce en su interior, como si doliera cada palabra que va diciendo, como si fuera las últimas que pronunciará - Yo sólo quiero que puedas verme como una amiga, sería el regalo más feliz de mi vida.

-Te prometo que lo intentaré - Ella sonríe levemente y veo como una lágrima circula por su mejilla, que intenta esconder. 

-Quiero saber un poco más de ti.

-No hay mucho que contar - Elevo los hombros y paro de hablar cuando el camarero viene con los cafés y la comida. Se disculpa y nos vuelve a dejar solas. Doy un sorbo al café, intentando hacer tiempo en la conversación. Noto que ella hace lo mismo, en señal de nerviosismo - Mi vida estos últimos años ha sido un terremoto, ni siquiera pude acabar mis estudios, después de todo lo que pasó, lo que menos quería era estar encerrada. 

-¿No terminaste de estudiar?

-No, dejé la escuela cuando pasó todo lo de Gregory y Thomas y... Bueno, de eso puede que te hayan hablado.

-He estado en contacto con Natasha estos días y me ha comentado un poco la situación - Ella me sonríe y adivino por qué camino irá la conversación ahora - ¿Le quieres?

-¿A Thomas? - Sí. Sé que ella quiere saberlo. Quiere intentar hacer de madre. ¿Quiere aconsejarme? No quiero que nadie tome decisiones o se crea en el derecho de hacerlas, pero sé que en su interior, sólo quiere mi bienestar. ¿Eso hacen las madres, no? La señora que me crió, sólo se preocupaba de su imagen - Nuestra relación es, un tanto, complicada.

-Entiendo... La mía con tu padre era igual - Ríe levemente sin pararse a pensar en lo que dice. Me mira tras un segundo de pausa y su mirada intenta disculparla. No pasa nada. Niego soltando una leve risa. Ya estoy un poco más habituada a que se refieran a Gregory como mi padre biológico - Eramos muy jóvenes y a mi familia no le gustaba que estuviera con un hombre más mayor que yo, me llevaba cinco años.

...Pero poco a poco se fueron dando cuenta de que todo era real, que nos amábamos profundamente y permitieron que Gregory me pidiera matrimonio... Creo que lo habría hecho sin su permiso de igual manera - Ríe y yo no puedo evitar reír junto a ella. Su cara y sus ojos expresan esa alegría de enamorada, como si en su interior estuviera reviviendo cada día que pasó junto a él - Pasamos por dificultades, bastantes... Nos distanciamos mucho varias veces, una vez tomé la decisión de separarme por completo, pero parecía que cuanto menos teníamos que estar juntos... Más nos necesitábamos. 

"Así es, así siento mi relación con el de tatuajes. Realmente es así"

-Pero al final lo superasteis todo...

-Todo no - Ella suspira agachando la mirada y remueve el café - Pero creo que esta historia ya te la han contado, ¿No?

-Sí, Gregory me contó la historia... No comprendo como alguien puede ser tan cruel y sin sentimientos, de verdad que no.

-Alguien que no tiene sentimientos no se preocupa de los de los demás, Nora - Ella niega varias veces - Manchó mi vida de una tinta que es imborrable, su recuerdo permanecerá en mi corazón todo lo que me queda de vida. 

-En el mío también... No puedes ni imaginar lo que he pasado, yo era una niña y no entendía porqué mi padre tenía algunos comportamientos conmigo de una manera tan dura.

-¿Te hizo algo?

-No físico... Nunca me tocó un pelo, sólo eran desprecios, falta de cariño que veía en niñas de mi edad y que conmigo eso no era así, sólo había cariño frente a las amistades.

-No sabes cuanto me duele saber eso, cuanto me duele no poder haber estado junto a ti - Ella solloza levemente y alargo mi mano para agarrar la suya. Su mirada se dirige a la mesa y luego a mí. 

-En cuanto a tu pregunta... Sí, le quiero, le quiero como no creía poder querer a alguien - Ella me sonríe y deja una pequeña caricia en el reverso de mi mano izquierda - Y también debo decirte que hace dos años conocí a un hombre que aun creyendo que su mujer había muerto hace muchos años, la seguía amando con locura y por eso dedicó su vida a vengarse de quien se la había arrebatado. 

Ella me mira y de sus ojos brotan algunas lágrimas. Me levanto de la silla y rodeo la mesa. Ella me mira y no puedo hacer otra cosa que abrazarla. Mis manos rodean su espalda y escucho como solloza en mi hombro. Una lágrima solitaria cae por mi mejilla y cierro los ojos para evitar que más le acompañen.

***

Estamos media hora más hablando de su infancia y juventud. Me cuenta algunas historias de su amor con Gregory y yo la escucho sin pronunciar palabra. Se nota que deseaba contar esas historias a alguien y no niego que me alegra escucharlo, escuchar ese amor que se mantiene aun cuando hay una gran distancia ya imposible de salvar. No volvemos a hablar de Roger ni Danielle en toda nuestra charla. Creo que eso lo guardará para más adelante. Estoy contenta por poder acercarme más a su historia. A la historia de mis padres biológicos. 

Decidimos salir a caminar de vuelta a la casa. Me informa que se quedará aquí más tiempo ya que en nuestra ciudad no hay nada que hacer ahora. También me cuenta que Senia sigue informándose de la situación de Tania tras su detención y que la primera se ha mantenido en contacto con ella, para ser el hilo conductor con los demás. No sabe más acerca de la situación de Danielle. Ya hace tiempo que le han internado en un sanatorio para intentar mejorar su situación psicológica. Esa mujer no está realmente bien. Los chicos se encargaron de eso. 

Tardamos un poco más en llegar y al entrar en la casa todos nos miran. Miro a Lina, que sonríe mirando a Natasha y mi mirada viaja hasta el tatuado, que está sentado en uno de los taburetes de la barra de la cocina. 

Me observa en silencio y no puedo evitar sonreír. Él me responde con el mismo gesto.

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Tengo una noticia que daros. Safe Haven, mi proyecto nuevo, ya está el prólogo. ¿Os pasáis a verlo y comentar que os parece? Gracias. 

Nuestra Nora, que por fin comienza a recuperar su normalidad. ¿Para siempre?