STAY (BP 2)

11. ¿Él?

Un regalito, por ser tan fieles. Espero que os guste.

Gracias por todo.

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Lo miro cuando se levanta del sillón. Miro instintivamente a sus piernas. Se queda mirándome mientras intento buscar las palabras adecuadas ya que parece que la saliva ha querido irse de mi boca. Miro a Paul y Marc y que me miran también.

-No vuelvas a coger mi coche en tu vida, ¿Entiendes? Dame las llaves.

-Mary me lo dejó para venir aquí.

-Me da exactamente igual, es mío y no eres nadie para cogerlo.

-Nora... Lo cogimos porque Mary lo dijo -Miro a Marc y me cruzo de brazos.

-¿Y? Mary puede haber dicho lo que sea - Vuelvo a mirar a Thomas que se levanta del sillón en el que se encontraba. Noto sus hombros tensos - No se te ocurra volver a coger mi coche ni nada mío, te lo advierto.

-No lo iba a chocar ni nada por el estilo, sabes que conduzco bien.

-No me fío de ti, así que te lo digo enserio - Nuestras miradas se cruzan y cierro mis puños - Ahora, mis llaves - Tiendo mi mano.

Me recorre con la mirada y justo cuando va a hablar Lucci entra al salón. Me doy cuenta de que no están ni Ethan ni los chicos.

-Nora - Me giro y me acerco a ella. Agarra mi mano y tras lanzarle una mirada a Thomas salimos de la habitación. Vamos a su habitación y hace que me siente - ¿Estás bien?

-Sí - Mi voz suena normal pero noto como mis manos tiemblan. Cierro los ojos y calmo el temblor.

-No sabía que habían venido.

-Han estado en mi casa, me los encontré allí.

-Sí, ya me ha dicho algo Ethan, estaba fuera con Paul y Marc y por eso entré rápido, pensaba que no estarías muy cómoda.

-Gracias, la verdad es que no lo estaba - Sonrío leve y ella me abraza.

-¿Qué ha pasado? ¿Te ha dicho algo?

-Nada, sólo entré a mi casa y estaban ellos allí, salí a dar una vuelta y llamé tu hermano... necesitaba hablar con alguien y después de que no me cogieras el teléfono le llamé a él.

-Ví tu llamada, pero estaba trabajando - Asiento mirándole.

-Tranquila, no fue nada importante, sólo que fueron demasiadas sensaciones en un momento...

-Te entiendo, yo creo que no podría soportar todo lo que te ha pasado a ti, es que no puedo entender como tiene el valor de mirarte si quiera a la cara.

-Ya está, no me queda otra que aguantarlo, él se irá después de la boda de Cara y Alex y volverá a ser todo como hasta ahora.

-¿Crees que quiera algo?

-¿Algo conmigo? - Río irónica - Él lo dejó muy claro, se fue y terminó con todo lo que podríamos haber tenido, no hay vuelta atrás.

-Lo sé pero Ethan me dijo...

-Nada, lo tengo superado... - La miro y sé que lo sabe. Sabe que aunque lo diga, su sola presencia me perturba. 

-Lo mantendré bien alejado de ti - Niego riendo y le abrazo.

-Gracias.

Tocan a la puerta y nos separamos. Lucci se sienta a mi lado cuando ésta se abre.

-¿Todo bien? - Ethan nos mira pasando su mirada de una a la otra. Lucci asiente y se acerca a su novio. Lo abraza de lado y ambos me miran.

-Yo creo que voy a irme... Hay demasiada gente en la casa - Sonrío leve levantándome. Cuando voy a pasar al lado de la pareja Ethan me para.

-Eres muy grande - Le sonrío cuando besa mi cabeza y salgo de la habitación - Nora.

Me giro justo en ese momento y miro a Ethan. Me tiende las llaves del coche y sonrío. Me guiña un ojo y le doy la espalda para seguir caminando.

Al pasar por el baño entro en él y me mantengo ahí durante cinco minutos. Tras hacer mis necesidades me lavo las manos y me quedo observándome a través del espejo. 

Cierro los ojos y su cabeza se me viene a la mente. 

Apoyo mis manos sobre el lavabo y suspiro. Calmo mi respiración antes de volver a salir.

No hay nadie en el pasillo por lo que camino hacia el salón, pero éste también se encuentra vacío. Escucho murmullos que llegan desde la cocina por lo que me acerco allí.

-No quiero verte cerca de ella, ¿Vale? - Escucho la voz de Lucci y me paro.

-¿Qué he hecho? Acabo de llegar, tampoco es una situación que me guste.

-¿Qué has hecho Thomas? La dejaste tirada, no sabes lo mal que lo pasó.

-Yo también, ¿O qué te crees? No podía andar, no podía darle lo que ella necesitaba en ese momento y no era bueno para ninguno de los dos, era lo mejor que nos podía pasar.

-Sólo querías huir, porque nunca fuiste capaz de aceptar lo que sentías, aún no entiendo como no te arrepientes de haberlo hecho, no sabes a quien has perdido.

Aprieto mi mandíbula escuchando. No quiero que Lucci tenga esta conversación, ni ahora ni nunca.

-No sabes nada Lucci, lo mejor era estar allí en Inglaterra, por el bien de todos.

-¿Qué estás diciendo?

-Nada, no estoy diciendo nada, sólo quiero que sepas que no quería hacerle daño.

Cuando me dispongo a entrar, el móvil comienza a vibrar en mi bolsillo por lo que camino al salón y descuelgo.

-Hola guapa - Sonrío al escuchar la voz de John y me acerco a la ventana. Miro a través de ella la calle vacía.

-Hola John.

-¿Qué haces?

-Ahora mismo estoy en casa de Lucci, hablando un rato con ella... ¿Tú? -Apoyo mi mano en el mueble de mi izquierda.

-Estoy algo aburrido y me preguntaba si querrías ver una película.

-¿En tu casa? - Río levemente. Nuestra amistad se había basado en eso. Ninguno de los dos tenía suficiente tiempo, sobre todo él ya que trabaja mucho por lo que, en cualquier rato que conseguíamos, quedábamos para ver una serie o algo diferente. Casi siempre en la suya porque pensaba que llegaría Ethan y él no está nada cómodo en su presencia.

La primera vez que fui a su casa me quede paralizada, ya que me la había imaginado con más lujos. Él me explicó que poco después de la entrada a la cárcel del señor Johnson y de que él se revelara ante su padre, se había mudado allí con unos pocos ahorros.

-Claro, ¿Tienes tu coche o paso a por ti? Acabo de salir del trabajo.

-No te preocupes... Han traído mi coche -Río amargamente.

-¿Quién?

-Nadie importante, no te preocupes, voy allí en media hora...

-Claro, aquí te espero, te quiero rubia.

-Adios John - Río negando ante su expresión y cuelgo.

Me giro guardando mi móvil en el bolsillo pero me paro, levantando la mirada del suelo al notar que había unos pies en mi espalda.

-¿Él?