35. Te tengo.

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-Quiero volver a confiar... Me lo merezco...

Nuestros ojos se miran sin separarse ni un momento. Noto como sus labios varían hasta formar una sonrisa. Su mano acaricia mi mejilla e instintivamente corto la conexión con sus ojos al cerrar los míos.

-Y yo estoy deseando volver a hacer que confíes - Su voz suena en un susurro y noto su aliento cada vez más cerca de mi rostro. Al volver a abrir los ojos, éstos viajan hasta sus labios a la vez que acorto la distancia que nos separa. 

Nuestros labios se unen y comienzan a danzar juntos. Una oleada de mariposas inunda mi estómago. Noto sus caricias en mi cintura mientras paso mis brazos por su cuello, acercando, si es posible, aún más nuestros cuerpos. Mi espalda toca lentamente el colchón durante el tiempo en el que nos acomodamos. 

Noto sus caricias en mi pelo. Sus dientes atrapan mi labio dejando una franja de aire entre nuestras caras. Tomo aire cuando comienza a depositar besos en mi cuello. Muerdo mi labio pasando mi mano por los tatuajes de sus brazos. 

Escucho el sonido de la puerta y Thomas interrumpe su acción poniendo distancia entre nosotros. Me incorporo un poco mirándole. Elevo los hombros y me acerco a la puerta mientras paso mi mano por los labios. Abro un pequeño espacio y veo en la puerta a una adormilada Lucci.

-¿Qué ocurre?

-Nada - Ella bosteza levemente mientras se apoya en la puerta - Ethan me ha comentado un poco lo que te está rondando por la cabeza... Lo de la mujer...

-No es nada, ya casi se me había olvidado... 

-¿Completamente segura?

-Sí - Sonrío levemente algo nerviosa. Sé como es ella y la relación que mantiene últimamente con Thomas. Ella asegura una y otra vez que no quiere que vuelva a hacerme daño y que me mantenga alejada de él hasta que esté completamente recuperada. Sé que si se entera de que Thomas ahora mismo está en la misma cama en la que estoy yo, montará un drama, por lo que intento por todos medios que no quiera acceder a la habitación. 

-¿Estás bien? - "Sí, perfectamente" Asiento intentando no reír - Te noto un poco rara.

-No, sólo quiero descansar... Mañana hablamos ¿Está bien?

-Claro - Lucci se acerca y besa mi mejilla para después caminar hasta adentrarse en su habitación. 

Cierro la puerta y me giro. Miro como Thomas me observa en silencio, incorporado en la cama. Camino hasta él y me siento a su lado, acurrucándome en él. 

-No sabes cuanto llevaba esperando esto, preciosa - Su mano envuelve mi pelo dejando leves caricias en él. 

-Quiero llevar esto con tranquilidad Thomas... 

-Lo sé perfectamente y no quiero acelerar nada... Sólo quiero que lo sepas, estoy aquí completamente para ti, no quiero nada más en todo este país que a ti... Así que olvida todo lo que pasó hace dos años.

-Lo voy a intentar - Elevo mi cara hasta que nuestros ojos se mezclan. Él asiente y deposita un pequeño beso en mis labios.

-Buenas noches - Deja un beso en mi cabeza y comienza a levantarse. Mi cabeza quiere dormir aislada de todo pero mi interior pide a gritos que él descanse junto a mí toda la noche. Me quedo muda hasta que él cierra la puerta por el exterior y me quedo completamente sola en la oscuridad  de mi habitación.

Sonrío al recordar sus besos y me tumbo intentando no reír.

Tras darle vueltas a la cabeza una y otra vez consigo quedarme dormida.

***

Voces en la planta baja de la casa consiguen despertarme. Al abrir los ojos noto la luz que entra desde el exterior, al haber olvidado bajar la persiana. Me incorporo y reviso entre mi ropa. Decido ponerme hoy un vestido de color blanco playero y un bikini negro completamente. Peino mi pelo en una coleta y voy al baño a lavarme la cara.

-Buenos días guapa - Alex me mira cuando salgo del baño y besa mi frente.

-Buenos días - Sonrío y bajamos las escaleras. En la planta de abajo Ethan y Cara preparan el desayuno. Doy los buenos días y me sirvo un vaso de agua - ¿Os ayudo en algo?

-No, Lucci y Thomas estaban colocando la mesa para desayunar. Elevo las cejas asintiendo y camino al exterior. Les miro mientras ellos hablan sin notar mi presencia. Trago levemente saliva al ver como Thomas le explica algo y ésta sólo responde con leves movimientos de cabeza. Lucci gira su cara y me mira, haciendo que el chico de tatuajes pare  de hablar.

-Hola - Sonrío levemente y Alex viene para relajar un poco la situación.

Los cocineros de hoy vienen con el plato del desayuno, lleno de tortitas. Alex me saca de ahí para comenzar a llevar las tazas hasta la mesa.

-Marc ha salido con el coche, tenía que ir a la mansión.

-¿Y eso? - Miro a Ethan cuando nos informa.

-Tenía que ver unas cosas sobre los rusos, no hay de que preocuparse - Todos asentimos y miro de reojo a Thomas, que se encuentra sentado en el otro lado de la mesa. Él me mira y me sonríe. Le respondo con la misma sonrisa y desayuno incorporándome a la conversación de los demás.

-¿Hoy vamos a bajar a la playa? - Cara da de comer a la pequeña.

-Está claro - Ethan ríe. Comentamos un poco lo que pretendemos hacer hoy. Los chicos deciden que tenemos que comer en la playa por lo que comenzamos a organizar todo para preparar la comida.

Al recoger el desayuno los chicos suben a cambiarse ya que nosotras ya tenemos el bikini puesto. Dejamos todos los platos del desayuno limpio.

-¿Has dormido bien? - Lucci se dirige a mí. Yo asiento mientras cojo en mis brazos a Sophie.

-¿Qué ocurría esta mañana? - Ella me mira y sabe lo que le digo.

-Nada, sólo estábamos hablando - Asiento y cuando los tres chicos bajan cojemos las cosas y caminamos a la playa.

Sophie se baja de mis brazos y corre hasta llegar a sus padres. Ambos le dan la mano y la pequeña da saltos. Río al ver la escena. Lucci camina con Ethan, abrazados de lado.

Yo camino la última con los brazos cruzados. Noto como mi pie se enreda en algún objeto del camino y pierdo el equilibrio. El suelo se acerca a cámara lenta hasta mi cara pero no llego a tocarlo.

-Te tengo - Escucho su voz en un susurro en mi oído. Sonrío al notar sus brazos en mi cintura y me incorporo. Le miro a la cara y mis manos inconscientemente agarran sus tatuados brazos.

-Gracias.

-¿Por qué?

-Bueno... por no dejar que me cayera - Río un poco nerviosa.

-Claro que no - Su mano acaricia mi pelo - Lo haré siempre que pueda.

Asiento cerrando durante un momento mis ojos y me separo un poco.

-¿Vamos? - Él asiente y yo muerdo mi labio inconscientemente siguiendo sus pasos hasta la playa.

Al llegar dejamos las toallas sobre la arena y los chicos corren al agua. Lucci les sigue con la pequeña.

-Quiero ir a caminar, ¿Vienes? - Elevo la mirada hasta Cara y asiento. La rubia informa a los demás y comenzamos a pasear. Lo hacemos en silencio hasta que noto su mirada en mi rostro.

Cara me observa en silencio. Le miro y ante su sonrisa no puedo contener la risa.

-¿Qué ocurre? - Río leve cruzando mis piernas sobre la toalla.

-¿Todo muy bien no? - Eleva una ceja sonriendome. Entiendo perfectamente lo que me dice.

-Poco a poco - Ella aplaude riendo. Niego agachando la mirada entre risas.

Cambio de tema para comenzar a hablar de cosas triviales. Reímos contando anécdotas de la pequeña hasta que alguien me llama la atención.

Veo la figura de la mujer de ayer a lo lejos. Lleva la misma ropa que cuando la vi y me observa desde la distancia.

-¿Qué miras Nora?

-Mira Cara, esa mujer - Al levantar mi brazo hasta su posición, la mujer se da cuenta y comienza a caminar en dirección contraria. Cara me mira.

-¿Qué? 

STAY (BP 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora