Magcon's Imagines 2

Storm... || NASH✨

✨Segunda parte de:
I tould you.✨

Duele; duele pensar que solo soy un pasatiempo para ti; que puedes irte y regresar cuando te parezca, que puedes sonreírme un día y al otro no... ¿Que ha cambiado? ¿Te han dicho algo acerca de mi? ¿Te diste cuenta de que no soy lo que esperabas?

Recuerdo perfectamente que habíamos empezado a apostarlo todo por nosotros; o al menos yo creía eso Nash.

Nunca nadie había tenido gestos como tú los tuviste conmigo; nunca nadie se atrevió a pasar esa delgada línea sin importarle los comentarios de los demás y tal vez eso fue lo que llamó mi atención.

Sigo sin entender porqué me observas a distancia cuando puedes hacerlo de cerca.

Sigo sin entender porqué intentas que nuestro libro no tenga más páginas para leer.

Admito que pienso mucho en ti cuando las luces se apagan; imagino un nosotros aunque viene siendo algo imposible.

Vas a irte; lo sabes y sin embargo actúas como si ya hemos llegado al final de lo que empezó.

Si es así; si este es el final Nash permíteme decirte que la primera vez que escuche mi nombre salir de tus labios, que tomaste mi mano, que me miraste a los ojos... Lograste que mi corazón latiera tan rápido y mis nervios me traicionaran, tuve que bajar la mirada, no sabia que acción llevar a cabo.

Intento creer que alguien te ha dicho algo, intentó creer que aún te importo... Porqué si solo intentabas demostrar que eres grande ante los demás me haz destrozado cariño.

Sigo esperando un mensaje tuyo, qué tal vez nunca llegue y me odio en ocasiones por permitirte llegar a ser alguien importante para mí en secreto.

Intentamos demostrarnos que nuestro "pequeño infinito" no fue relevante; pero sé Nash que cuando nuestras miradas se conectan sientes lo mismo que yo, o bueno, a lo mejor es imaginación creando situaciones para nada reales.

— Una vez más estoy hablando sola — murmura.

Pestañeo varias veces sin apartar la vista de el pasillo por donde cruzaste.

— Lo siento — respondo con sinceridad. — Esto me está afectando mucho.

— Lo sé — asegura. — Creo que te enganchaste demasiado con él.

— Lamen... —

— Tú — me señala. — Eres demasiado para él ¿vale? — toma un suspiro. — Mereces algo mejor que no te haga pensar en qué lugar ocupas en su vida.

Sin agregar más a la conversación la abrazo; estoy rota aunque lleve una sonrisa plasmada en mi rostro cada día, tengo mis pensamientos vueltos un lío... Eres sinónimo de tormenta; Tú eres mi tormenta Nash.