Pokemon Genesis: La creación

Capítulo 35: Se Abre el Telón.

Al regresar al campamento, los Mewtwos, Mew y Alakazam encontrando el lugar completamente vacío, asustados van al C.P.C el cual está lleno de pokemon heridos, muchos de ellos completamente debilitados. Entre todo el caos de las pokenfermeras no logran ver bien nada pero distinguen a Constantine junto a Mewtwo gravemente heridos siendo atendidos con el movimiento Amortiguador por Blisseys pero sin notar mejora alguna, corren a verlos y notan que cerca está Alba completamente inconsciente, pero se ve más estable que sus compañeros aunque con varias heridas también.

Sin entender que sucede Alakazam busca a Toby para preguntarle qué sucedió, no tardó mucho pues estaba igual de herido que los demás pero aún de pie cerca de una camilla, el anciano pokemon se le acerca notando que la mirada de su amigo es una totalmente fría y sin emociones, él nunca lo había visto  en ese estado así que se apresura a interrogarlo.

Alakazam: Toby ¿Qué pasó? Todos están heridos o debilitados, habíamos tenido derrotas antes pero ninguna de este modo.

Toby: No perdimos (dice con la mirada fija en el vacío).

Alakazam: ¿Qué? (pregunta asombrado a la vez que incrédulo de lo que acaba de oír)

Toby: No perdimos... ganamos la batalla, Penumbra Negra no pudo quedarse con el territorio pero... perdimos en vencer al enemigo.

Alakazam: No te entiendo, Toby ¿Qué fue lo que paso?

Toby: Fuimos al campo de batalla, preparados para todo, menos para "eso"...

>>>>>>>FLASHBACK<<<<<<<

En un terreno plano y nevado con algunos pinos alrededor están los pokemon de Espada del Rey de un lado viendo hacia el horizonte esperando cualquier señal de Penumbra Negra, después de un rato una nube de tormenta empieza a acercarse.

Toby (Narrando): No es común ver una nube de tormenta en un lugar donde hay nieve, pero en ese momento era a lo que menos le prestaba atención. De haber sabido lo que esa nube significaba, hubiera ordenado la retirada en ese instante.

Debajo de la nube de tormenta se empiezan a apreciar varios pokemon tipo siniestro y fantasma, entre otros, pero al frente de ellos había uno muy poco usual en esa región, un pokemon cuyo nombre era lo único que sabían de él. Con un sólo ojo rojo cubierto por un aro dorado, su cuerpo redondeado con lo que parecía ser dos ojos y una boca con dientes punteados dibujada en su pecho, una antena en su cabeza, dos brazos que parecían terminar en guantes y una cola de fantasma en lugar de piernas de color café oscuro con algunas líneas doradas dibujadas, ese pokemon era el causante de todo el caos que en ese momento regía a los pokemon de Kalos, Dusknoir...

Toby (Narrando): Debo admitir que cometí el error de subestimar a mi oponente, la nube sobre él y los que lo seguían podía ser una variación del movimiento Danza Lluvia o un truco de magia como los tuyos Alakazam, pero no descubrí sino hasta muy tarde que era una ventaja enorme que él tenía sobre nosotros.

El combate entre ambos bandos empezó, la fría mañana de las cercanías de Ciudad Fractal se vio opacada por una oscuridad inmensa que, sumada a las pequeñas motas de nieve que cayeron, nublaron la visión casi por completo, a menos claro que estés diseñado para ver en la oscuridad como todos los pokemon de Penumbra Negra. Estos lo aprovechaban atacando por todos lados a sus enemigos quienes como podían se defendían de ellos.

Constantine y Alba eran sumamente útiles ya que cubrían a los demás pokemon que no veían en la oscuridad, no tenían problema alguno en luchar bajo esas condiciones, lograron equilibrar un poco la balanza, pero en cuanto Dusknoir se percató de esto empezó a enfrentarlos frente a frente, la batalla duró pocos instantes, primero fue por el traidor a quien atacó de un Puño Sombra, sin poder hacer nada para evitarlo lo recibió y respondió con un Tajo Umbrío, se dispuso a ser un golpe directo pero fue frenado por la palma de la mano del fantasma que sin mayor dificultad detuvo su ataque mientras con la otra lo golpeó con una Bola Sombra, para ser poco efectivos los ataques de Dusknoir le hacían mucho daño a Constantine, Alba se percató de esto así que decidió usar Ventisca, un movimiento por el cual es famoso su especie, el líder de Penumbra Negra recibió de espalda el ataque viéndose bastante herido por este, aún así, sin inmutarse por las heridas este avanzó hasta el Weavile preparando una Bola Sombra a quemarropa para acabar con él, la Froslass dandose cuenta de esto se interpuso lo más rápido que pudo entre el ataque lanzando otro movimiento de Ventisca esta vez de frente a su oponente quien sin molestarse en esquivarlo lanzó su Bola Sombra para enfrentar ambos movimientos, el ataque ni siquiera desaceleró ante la poderosa Ventisca de Alba quien lanzó otra poco antes de que la esfera de oscuridad le diera, pero desgraciadamente ese ataque al igual que el anterior fue destruido, la explosión la mandó a volar junto a su amado quien ante esto se levantó lleno de furia, se dispuso a usar Garra Umbría para acabar con su antiguo jefe quien usando el mismo movimiento lo golpeó primero debilitándolo por completo.