Pokemon Genesis: La creación

Capítulo 32: Su Mediodía.

Terminado el entrenamiento de Pikablue otro miembro del Equipo Rocket entra a la sala con su pokebola en mano para capturarlo, parecía una tarea sencilla ya que no fue problema cuando lo hicieron con LightHo-oh pero el pobre no sabía lo que le esperaba.

M.E.R: muy bien pequeño, hora de capturarte pokebola ¡ve!

Pikablue: pika ¡pi! (dice risueño)

Pikablue rebota la pokebola con su cola devolviéndosela al soldado justo en la mano, este un poco confuso la vuelve a lanzar pero el pokemon la rebota una y otra vez hasta que el soldado se cansa y se empieza a molestar.

M.E.R: oye no tengo todo el día para esto, vas a entrar quieras o no (dice molesto)

El soldado se lanza sobre Pikablue para atraparlo pero este lo esquiva sin ningún problema, le lanza una pequeña chispa a su pie haciéndolo resbalar y besar el suelo causando un mar de carcajadas en el pequeño pokemon azul.

Pikablue: ¡pika pika pika pika! (ríe a carcajadas)

M.E.R: ¡rrrrg! [Se levanta] Tan solo deja que te atrape pequeño demonio.

Pikablue: ¿pika pi? Traduciendo... ¿a quién llamas pequeño? (dice altanero)

El soldado saca otra pokebola, está vez con un pokemon dentro, la lanza cerca de Pikablue para iniciar un combate pero el astuto pokemon rebota la pokebola de vuelta a la mano de este para luego aturdirlo con un fuerte Rayo.

Pikablue: lo siento, pero tengo mejores cosas que hacer que perder el tiempo contigo.

Gracias a que el soldado olvido cerrar la puerta el pequeño clon pudo salir fácilmente, empezo a correr por los pasillos, puede que haya nacido ese mismo día pero no era nada inocente, casi todo lo que conocía el Pikachu de Red lo sabía él, puede que hasta más, durante su tiempo en el tanque pudo escuchar muy bien lo que los extraños seres a su alrededor decían, por lo menos desde que tuvo oídos y un cerebro para recordarlo, sabía que planeaban tenerlo en una extraña cosa llamada pokebola para usarlo cuando quisieran, eso no le gustaba, no sabía porque pero odiaba la idea de estar encerrado, sin planes de pensarlo 2 veces empezó a buscar la salida del lugar para escapar lo antes posible aunque suponía que no sería fácil.

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Giovanni fue informado del ataque de Pikablue a un soldado así como de que ahora estaba intentando escapar, inmediatamente ordeno que lo capturaran enviando a todos los soldados que tuvieran a su disposición a bloquear la salida y que cualquier científico que tuviera un pokebola con un pokemon en su interior saliera a encargarse de su creación, no podía permitir que se les escapara. Sin perder el tiempo hicieron sonar la alarma por todos los pasillos, en segundos varios soldados le bloquearon el camino a Pikablue.

Soldado: no podrás escapar pequeño (dice confiado)

Pikablue: ¿y cómo planean impedírmelo?

Los soldados sacan cada uno un Sandslash los cuales se ponen en posición de combate al instante.

Pikablue: ah, así, bueno ellos serán un problema [sonríe confiado] al igual que yo.

Pikablue acelera cargando un Placaje Eléctrico para correr a máxima velocidad, los soldados ordenan usar Terremoto a sus pokemon los cuales atacan al unísono provocando un poderoso temblor que agrieta el suelo y hace temblar las paredes, sin embargo Pikablue preparado para esto corre por los muros trepandolos gracias a su velocidad, logra pegarse al techo esquivando por completo el ataque dejando sorprendidos a los soldados así como a los pokemon que lo veían, cuando está lo suficientemente cerca cancela su Placaje Eléctrico para lanzarse contra los Sandslash con una potente Cola de Hierro para cada uno que los deja debilitados sin problemas, los soldados al ver esto se asustan y deciden empezar a correr pero no logran dar el primer paso cuando reciben un potente Trueno de parte de Pikablue que los deja tirados en el suelo inconscientes.