Capitulo 44

2.3K 159 1
                                    

El telefono sono en medio de todos, Rodrigo y Elizabeth, con una miradahieron que los demas desaparecieran de la sala dejando solo a Alonso, Samantha, Rodrigo y Elizabeth alli.

Los caballeros se pusieron de pie y corrieron hasta el despacho al mismo tiempo que Elizabeth corria hasta la cocina, eso ella no se lo iba a perder.

Espero a que descolgaran y luego escucho por el telefono de la cocina la conversacion.

- ¿Ahora quien es el poderoso Valderrama?.- Esa voz ella la conocia, era Louis Costa.- Quiero diez millones de dolares para la media noche, nos veremos en el Estudio de Baile que se encuentra en las afueras de Harlem.

Era el mismo en el que Elizabeth habia estudiado ballet toda su vida.

- Y mi hija?.- Pregunto Rodrigo mirando a Alonso.- ¿Donde esa?

- Te la devuelvo cuando tenga el dinero en mis manos.- Una risa malvada se escucho al otro lado.- Aunque debo confesar que me tendre que quedar con las ganas de saber que tan bien la hace tu mujercita.

Y colgo.

Elizabeth volvio rapidamente al salon junto a Samantha justo cuando los chicos salian del despacho.

- ¿Que paso?.- Dijo Elizabeth poniendose de pie al instante.- ¿Que te dijo?

Rodrigo paso una mano por su cabello y se dejo caer en el sillon.

- Diez millones de dolares.- El no podia decirle que el tendria que ir.- Volvera a llamar para decir en donde debo llevarlo.

- El?.- Fingio Samantha curiosidad.

- El hijo de perra de Costa.- Siseo Alonso sentandose junto a su esposa.

- En una de las cajas fuertes de mi piso hay cinco millones de dolares.- Dijo Elizabeth poniendose de pie.- Podemos ir por ellos.

Rodrigo imito el gesto de su mujer y dio un par de vueltas en el salon.

- Creo que en mi caja fuerte hay una cantidad similar.- Volvio a su despacho y reviso.- Perfecto

- Entonces no hay necesidad de ir al banco.- Dijo Alonso acomodando su camiseta.- Las llaves.

Elizabeth asintio y subio por las copias de las llaves de su casa, unos minutos despues volvio al salon.

- Regreso pronto cielo.- Rodrigo beso su frente y acaricio su rostro.- Te amo.

- Yo tambien.- Y los vio salir de esa fortaleza.

Inmediatamente Elizabeth y Samantha corrieron hasta el despacho y cerraron con llave.

- ¿Que estas pensando Elizabeth?.- Samantha sirvio un vaso de agua y tomo un sorbo.

Elizabeth presiono un boton en la libreria que al instante le dejo ver un juego de armas.

- Estudie toda mi vida en ese estudio.- Dijo Elizabeth mientras comprobaba una Glock 17.- Prometo que estaremos solo por precausion y Costa ni nadie lo notara.

Samantha solo pudo negar con la cabeza.

- Estas loca.- Avanzo hasta el estante y tomo una Sig-Sauer P-226.- Esta te viene mejor.

Elizabeth la tomo en sus manos y le gusto la sensacion.

- Es mi hija y el hombre que amo.- Dijo ella sacando una caja de balas y unos chalecos.- Si no es necesario no haremos nada, ademas conozco ese estudio como la palma de mi mano.

Samantha solto un suspiro de resignacion y asintio.

- En cuanto vea a tu hija me la llevo.- Dijo Samantha terminando el vaso de agua..- En cuanto salga de ahi te dejo un mensaje.

A merced del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora