Epílogo - 6 meses después

580 71 13
                                    

Estaba nervioso, debía admitirlo, no se había sentido así en mucho tiempo y quizá le estaba dando mucha más importancia de lo que debería, su corazón latía con tanta fuerza que le dolía el pecho. Observo su reflejo en el espejo y volvió a acomodar su cabello por quincuagésima vez aquella mañana. Revisó que no tuviese nada entre los dientes y se ajustó el chaleco bajo el traje. Raven le había ayudado a elegir su atuendo, pues según ella, de aquella forma Charles no regresaría soltero.  

Se dirigió al set de grabaciones, su paso era firme y sin embargo sentía que podía fundirse con el suelo en cualquier momento.

—¡Profesor Xavier! Cuánto tiempo

Charles reconoció a uno de los expertos que les habían evaluado en el experimento.

—Buen día, es un placer volver a verle.

—Igualmente— Respondió el hombre ofreciendo su mano en un cordial saludo — Me alegra que haya podido hacer espacio para nosotros.

  —El placer es mío. Siempre que pueda hacer algo por la ciencia, lo haré, incluso si tengo casarme.

La mujer soltó una carcajada y a continuación le habló un poco sobre las otras parejas que habían participado en el experimento. Estaban pensando en repetir el experimento está vez con un mayor control y quizá un mayor número de parejas, hablaron sobre diversas variables hasta que una chica de producción les interrumpió para informarles que estaban por iniciar. Ambos se despidieron y Charles siguió a la chica hasta una pequeña habitación tras el escenario.

—Por favor, espere aquí hasta que le llamemos.

—Por supuesto.

El ojiazul tomo asiento en una de las pequeñas sillas esparcidas en la habitación, no podía observar lo que ocurría del otro lado pero podía escuchar claramente la la voz del presentador.

¡Bienvenidos una vez más a "Matrimonio a Primera vista" en esta ocasión queremos saber qué fue con las parejas que estuvieron participando en este experimento después de seis meses de la culminación de éste!

Entre aplausos y vítores del público presentaron a una de las parejas. Parecía tratarse de un chico y una chica jóvenes, hablaron sobre la boda, la luna de miel y el como hacía 6 meses habían decidido que su amor era real, aunque ahora parecían odiarse. Charles no lo vió pero pudo intuir que el chico salió enfurecido después de que la chica mencionara sus despilfarros de dinero y su adicción a la bebida, no sin antes tratarla de "fácil" y "manipuladora".

Antes de poder saber el desenlace de la historia, tras el alboroto con los miembros de seguridad, alguien abrió la puerta de la habitación. Charles se levantó de su asiento torpemente, centró su atención en el individuo al otro lado de la habitación y contuvo el aliento.

Erik lucía espléndido. No le bastaba más que un simple pantalón formal y un jersey ajustado para robarse las miradas de cualquier alma mortal. Se había rasurado, Charles pudo notar el olor a su colonia desde su lugar, era exquisito. Y cuando sus miradas se cruzaron no pudo hacer menos que sonreír cuál niño en navidad. Ah, la sonrisa de Erik, había extrañado ver aquella gran sonrisa.

—Perdona el retardo.

—No te preocupes, en realidad creo que yo llegue demasiado pronto.

—Luces muy bien— Dijo Erik acercándose a quien fue su esposo.

Charles rió suavemente y le devolvió el cumplido, algo que remotamente recordaba que no había sido fácil en el pasado.

—Tarje algo para tí— Dijo Erik señalando la pequeña caja en sus manos.

Matrimonio a primera vista Donde viven las historias. Descúbrelo ahora