Nuestras Ventanas. [Completa]

12.

Henry toma una rebanada de pizza mientras se acerca a la parte trasera de la sala, seguramente para no molestar a mis amigos ocupando un lugar en el sillón que alguno de nosotros podría ocupar, me dedica una que otra mirada mientras lo veo apresurarse para terminar la pizza, la cual disfruta de una gran manera, mientras la muerde y el queso se estira lo más que puede, me rio un poco al ver como el queso se corta cayéndole a la camisa de repartidor de color azul.

Cuando regreso la vista para poder ver la televisión me encuentro con la fugaz mirada de Nat, ya lleva tiempo haciendo eso, pero hago como si nada hubiera pasado, mientras empieza una nueva película en Netflix, no preste atención al nombre, pero a como me describió Sandy, trata de un maestro que se vuelve boxeador para salvar el club de música de su escuela, de reojo volteo a donde estaba Henry, y ya o lo vi donde estaba, me levanto dejado mi plato en la mesa cuando veo a Henry acercarse a su casco de repartidor.

– ¿Ya te vas? – Le digo acercándome al portal de la puerta mientras él ya va a medio camino a su vehículo.

– Obviamente Taylor Navi, tengo que trabajar – Dice con una sonrisa blanca mientras parece ajustar algunas cosas en su casco.

– Ven – Lo digo, pero en realidad soy yo quien se acerca sacando mi cartera, y entregándole un billete de cincuenta, veo como abre los ojos sorprendidos.

– Pero si ya me has entregado el dinero exacto.

– Lo sé, pero esto es tu propina, por quitarte unos minutos de tu tiempo y que posiblemente entregues tarde el resto de los pedidos.

– No puedo aceptarlo – Dice negándose mientras se acerca a su motocicleta y lo sigo de cerca.

– Tienes que hacerlo, es tu trabajo y esta es una propina muy bien ganada – Le extiendo el billete aún más y el sigue igual con su expresión mientras que con unas cuantas zancadas se acerca a su vehículo y me dedica una mirada, tiene un brillo en los ojos proveniente de la luz del interior de mi casa.

Se sube a su motocicleta mientras se ajusta el casco, no puedo ver sus ojos, pero sé que me está viendo, no arranca, por lo que pienso que no se quiere ir tan rápido. Sin que me lo pida meto si billete en su bolsillo derecho de su pantalón mientras me alejo un poco.

– Nos vemos después Taylor Navi.

– Lo mismo digo Henry Hedmark – Levanto la mano en ademan de despedida y el hace lo mismo, mientras la motocicleta avanza y se va por la calle principal, dejando únicamente el sonido de su vehículo alejarse.

Entro lentamente en mi casa cerrando la puerta con cuidado, dirigiéndome al lugar que estaba ocupando en el gran sillón, tomando otra rebanada de pizza, mientras mis amigos no pierden rastro de la televisión, de reojo volteo a ver y mi hermana ya no está, tal vez en lo que salí ella subió a su cuarto. Me explican rápido lo que ha pasado la película, Sandy en especial le está encantando esto, y lleva casi toda la tarde sin mencionar nada de alienígenas o algo parecido, me acomodo las gafas y veo a Nat, quien también me está mirando de reojo, un poco más evidente que yo, pero sin siquiera disimular que lo está haciendo.

Ya cada quien está en su casa, y el reloj ya está a punto de marcar la una de la madrugada, mientras el ambiente exterior se siente el ambiente de la una de la madrugada, con el aire frio mientras me coloco el pijama, en esta ocasión tiene el logo de Deadpool, miro por la ventana y veo como Nat está entrando a su casa, apenas me dirigió la palabra desde cuando salí a despedir a Henry Hedmark, por alguna extraña razón.