Capitulo 8: Los más fuertes.

525 51 4
                                    

- "Shikka, ese es el nombre de la escuela en donde asisten Zina y Alek " - pensó el rubio frunciendo el ceño, no quería ver a ninguno de sus familiares en esos momentos - lo siento, pero yo no puedo ir ahí.

- ¿Por qué? Tus llamas regresaran pronto y ademas eres el mejor de tu generación - le pregunto ladeando un poco su cabeza, acariciando el lomo del zorro blanco - no tienes excusa para faltar.

- ... - agacho la mirada soltando un suspiro, tenia razón Zivon, no tenia razón para faltar. Viejo terco - esta bien, usted gana... iré a su escuela - murmuro con resignación, sacando una pequeña risita de parte del hombre mayor.

- ¡Genial! - festejo el mayor despertando al cachorro de zorro que antes dormía a en sus brazos - ahora escucha, no necesitas llevar nada. La escuela te dará todo lo que necesitaras - le dijo felizmente, entregándole a Led de vuelta a su dueño.

- ¿Podre llevar a Led? - le pregunto mirándole con suplica.

- Claro, pero luego tendrás que firma un documento en donde dice que te responsabilizas de lo que le pase al zorro - le dijo tendiéndole la mano derecha con una sonrisa amable - chico, fue un gusto volverte a verte. Te vendré a buscar en tres semanas.

- Lo mismo digo, fue un placer volver a verle - le dijo estrechando la mano de Zivon, quien sonrió amablemente antes de desaparecer en la niebla.

- Ku~ - Led le miro confundido, levantando su pálida cabecita para lamer la mejilla de Lori con cariño.

- No te preocupes, no dejare que nada te pase en esa escuela de salvajes - le dijo sonriendo con pena, él sabía que Shikka es una escuela en la que los más fuertes mandan y los débiles obedecen; en esa escuela es muy común los asesinatos ya que de ahí solo salen vivos los más fuertes. Los Cielos son enviados ahí con la esperanza de encontrar a unos buenos guardianes, en Shikka también hay alianzas en las que los débiles pueden apoyarse - solo espero salir vivo de esta.

Tres semanas después

 Lori se encontraba sentado en las escaleras de su cabaña esperando pacientemente a que Zivon apareciera, su cabello rubio estaba húmedo y desprendía un delicioso aroma a rosas y sus ojos brillaban con nerviosismo, realmente no quería ir a esa escuela. Led miraba a su amo con preocupación, Lori le sujetaba en brazos con firmeza, pero aun así podía sentir el aroma del miedo viniendo de él. El joven vestía una remera negra y sobre esta llevaba una camisa a cuadros roja, también usaba unos jean claros y una zapatillas negras. En su cuello llevaba una fina cadena dorada, no estaba acostumbrado a no llevar su anillo con él, es por eso que se consiguió otra cadena, sin ella no se sentía cómodo.

- ¿Has esperado mucho? - le pregunto una voz jovial al momento que una luz se hacia presente, Lori se tapo los ojos con la mano derecha mientras soltaba todo el aire que había estado conteniendo a causas de los nervios.

- No, señor - le respondió levantándose de su lugar con Led en brazos, sonriendo tensa mente al anciano, quien le miro con curiosidad.

- ¿Por qué estas tan nervioso? - le pregunto acercándose al chico, colocando su mano izquierda sobre el hombro del muchacho.

- Por nada, señor - le respondió intentando tranquilizarse.

- Bueno, si no quieres decírmelo esta bien - le sonrió tranquilizadora mente, luego miro su muñeca, justo adonde se encontraba un finísimo reloj de oro, y cambio a una mueca de sorpresa - ¿Tan rápido pasa el tiempo? ¡Rápido! Tenemos que apurarnos - dijo chasqueando los dedos, haciendo que la ropa de Lori cambiara como por arte de magia: ahora vestía con zapatos marrones, pantalones khakis de color crema, una camisa blanca junto con una chaqueta Cardigan gris oscuro - ese es el uniforme de la escuela - decía admirando cuidadosamente el como le quedaba al joven - bueno, vamos, ya es hora de irnos.

Armonía y Discordia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora