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Al día siguiente

Me desperté por unos fuertes ruidos que venían de abajo. Era domingo por lo tanto no iba al estudio, me levanté me cambié y baje a ver qué pasaba.
En la sala me encontré a Ludmila y Priscila con maletas y algunas cajas.

- Buen día.

- Buen día.

- ¿Los ayudo?

- Por favor.

Los ayude con algunas cajas de ludmila mientras ella subía sus dos maletas. Papá por otro lado llevaba las cajas de Priscila hacías su cuarto y Priscila sus maletas. Al entrar al cuarto de ludmila lo mire y tenía algunas cosas como un tocador, una cama, el placard, algunos estante, dos mesitas de noche - una a cada lado de la cama -.
Algunos de los muebles eran rosas, deje las cajas en el piso y ludmila dejo sus maletas arriba de la cama.

- ¿Te ayudo a desempacar?

- Bueno.

Estuvimos hablando y ordenando hasta que llegó la hora del almuerzo y bajamos pero yo antes pase por mi cuarto para agarrar dos bolsas. Baje y me senté

- ¿Y eso?

- Un regalo de bienvenida.

Dije dándoles una bolsa a cada una, ayer mientras Ludmila hablaba por teléfono aproveche y compre algunas cosas

- ¡AY! ¡ME ENCANTAN! - Exclamó abrazandome - ¡Gracias!- Eran unos aros de oro con una especie de perla rosa en el centro..

- Gracias Vilu, es hermoso - lo de ella era un collar con una especie de diamante turquesa.

- De nada.

Después de almorzar terminamos de desempacar y salimos los cinco (no sé olviden de sol eh) a pasar un día en familia, aunque aún no lo éramos.

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