Querido Robert

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     Washington D.C – sábado; abril 2017.

―Muy bien chicos, hay tan solo tres habitaciones. Dado que somos seis y en su mayoría somos parejas, creo que podemos compartirla. Ustedes no tendrán ningún problema, ¿cierto? ―Eric observó a Archie quien se encontraba mirando de soslayo a Harry.

¿Compartir la habitación?

―Claro que no tendremos problema, Eric. No te preocupes. ―respondió un sonrojado Harry, mirando de soslayo a su nuevo compañero de habitación. ―¿Cuál ocuparemos?

―De acuerdo, Rob y yo estaremos en la primera, Camila y Ethan en la segunda y ustedes en la tercera. ―sujetando a Robert de su mano y entrelazando sus dedos, comenzó a caminar hacia el pasillo de las habitaciones. ―Nos reunimos en una o dos horas para irnos a la playa, nos vemos chicos.

Los cuatros restantes de la sala se quedaron mirando a la pareja desaparecer en la habitación, Camila soltó una risita y copió la acción del dueño de la casa, llevándose con ella a su pareja. Archie los miró y luego suspiró girándose para ver a Harry, quién se encontraba mirándolo un poco tímido. El moreno sonrió un poco y comenzó a caminar hacia la habitación restante, seguido del castaño.

Archie ingresó a la habitación en silencio y caminó hacia la cama que allí había, tomó asiento en esta y miró al chico que había cerrado la puerta después de haber ingresado. Ambos se encontraban nerviosos. Harry estaba allí, en una sola pieza, observando al chico que le gustaba desde hacía un año y que por cobarde no se le había acercado.

Por otro lado, Archie estaba allí pensando en lo que Robert y Eric harían en una habitación solo para ellos. Desde hacía algunos días estaba sintiéndose algo extraño con respecto a su mejor amigo y temía que eso se debiera por las cartas.

―Entonces... ¿cómo dormiremos? ―el castaño mordisqueó suavemente su labio inferior como acto reflejo de cuando estaba nervioso. Archie se obligó a dejar sus pensamientos de lado y lo miró alzando sus hombros.

―Yo dormiré en el suelo, no te preocupes.

―¡No! No es necesario, Archie. Yo puedo hacerlo. ―murmuró bajando un poco la mirada. Se sentía algo iluso en ese momento, ¿cómo había podido imaginarse durmiendo con Archie?

―No lo harás, Harry. Yo dormiré en el suelo.

―Entonces ambos lo haremos. ―se quejó cruzando sus brazos. Archie lo miró y evitó reír, le causaba algo de ternura verlo hacer esos gestos.

―Dormiremos juntos, ¿está bien? ―el chico asintió abandonando su posición para caminar hacia el moreno y con timidez abrazarlo suavemente.

―Te quiero, Archie... ―musitó causando en el contrario un extraño sentimiento.

···
¡Capitulo nuevo!

Espero les guste. Recuerden hacerme saber sus opiniones mediante votos y/o comentarios.

Linda noche.