Querido Robert

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―Lo odio, en serio lo odio. Bueno, no. En realidad estoy molesto con él, demasiado molesto. ¿Por qué se dejó hacer eso? ¡Es que quiero golpearlo!

Camila observaba con el ceño fruncido a su mejor amigo. Agradecía que se hubieran reunido en su casa y no en otro lugar, ya que los gritos que Robert daba llamaban la atención de cualquiera. Además no entendía nada. Desde que Robert había llegado tan solo decía cosas sin parar.

―Robert, necesito que te calmes y me digas que sucede, ¿está bien? no entiendo nada de lo que dices. ―el castaño suspiró y miró a su mejor amiga por un momento asintiendo.

―Le dije a Harry que se alejara de Archie y no lo hizo, ¿sabes qué hizo? ―Camila negó lentamente. ―Besarlo. Lo encontré ayer en el parque besándolo, ¿pero qué se ha creído ese idiota? ―Camila comenzó a reírse al entender todo mientras que negaba. ―¿Y tú por qué te ríes? Es grave lo que te estoy diciendo.

―Robert, ¿todo tu enojo es porque Archie se besó con Harry? ―el castaño asintió cruzando sus brazos. ―Al fin lo hicieron, creo que se demoraron mucho.

―¿Qué? Espera, ¿tú lo apoyas?

―¡Claro! Es bonito que Archie se esté dando una oportunidad. ―y que acepte que contigo no tiene una, pensó la fémina. ―¿Cuál es el problema? Robert… no me digas que es lo que pienso.

El muchacho se alarmó al notar la mirada inquisitiva de su mejor amiga. De un momento a otro sus mejillas se sonrojaron y sus manos comenzaron a temblar. Incluso un sudor frío comenzó a recorrer su espalda. Robert temía cada vez que Camila lo miraba de esa forma.

―¿Qué estás pensando? ―titubeó. La fémina cruzó sus brazos y se acomodó de una mejor manera en el sofá.

―¿Te gusta Archie?

―¿Qué? No, no. ―negó rápido riendo nervioso. Camila alzó sus cejas y sonrió al darse cuenta de lo que realmente estaba sucediendo. Si Robert no quería aceptarlo, su expresión corporal si lo hacía. ―No digas tonterías, a mí me gusta Eric, ¿de acuerdo? Archie es solo mi amigo y me preocupo por él.

―Claro, solo tu amigo. ¿Entonces por qué tienes celos de Harry? ―cuestionó sin dejar de verlo con aquella mirada fría y calculadora.

Robert bajó la mirada a sus manos y las entrelazó para tratar de ocultar un poco el temblor de estas.

―Porque Harry nos está reemplazando. Nos está quitando su amistad.

―Ajá, ahora cuéntame una historia de vaqueros. ―comentó con ironía Camila mientras se colocaba de pie y se sentaba en el sofá frente a su mejor amigo. ―Te gusta Archie, Robert.

―Me gusta Eric. ―intentó corregirle.

Camila suspiró pasando una mano por su frente, como si realmente estuviera agotada.

―Mira, si quieres mentirte hazlo. Pero a mí no logras engañarme. Si no quieres aceptarlo, entonces no lo hagas. Pero luego no te arrepientas cuando te des cuenta de que es demasiado tarde.

•••
¡Capitulo nuevo!

Espero les guste. Recuerden hacerme saber sus opiniones mediante votos y/o comentarios.

Linda noche. ♡