CAPITULO 31. LA MUERTE DE HELIOS

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~El dìa del baile llegò, deseaba tanto verte con ese vestido...bailar toda la noche y decirte a cada momento cuanto te amaba...pero algo presentìa, algo me tenìa inquieto, tenìa un miedo irracional...Seiya tenìa los ojos vidriosos y un nudo en la garganta.

FLASHBACK

El baile comenzò, mucha gente estaba reunida en el salòn bailando, riendo, comiendo, festejando la futura unión de dos grandes reinos.

El rey Hiperiòn y la Reina Tea estaban sentado en sus respectivos tronos, a su lado izquierdo habìan colocado unas sillas donde se sentarìan los reyes de la Luna quedando los cuatro tronos en el centro y a los lados opuestos unos pequeños bancos donde estarían Helios y la Princesa Serenity.

Helios estaba dando vueltas junto con Endimiòn, Aeton y PIrois.

~Tranquilo, estaremos aquì pendientes, no permitiremos que nadie les haga daño...~Aeton miraba a su señor con profunda devociòn.

~Quiero que se diviertan ustedes dos, ¿Me entendieron? Decía Endimion tranquilo hacia Aeton y Pirois.~Por cierto dos bellas jovencitas están buscándolos.Señaló Endimion hacía la puerta donde

Sailor Venus, Sailor Mars, Sailor Jupiter y Sailor Mercury entraban al gran salón con bellos y finos vestidos, Mercury y Venus buscaban con la mirada a Aeton y Pirois. Mars juntaba a sus dos amigas y señalaba con la mano por donde se acercaban los guardias de Helios.

Ambas con una sonrisa los recibieron, mientras Jupiter y Mars se alejaban hacia la mesa de bebidas y comenzaban a platicar con dos jóvenes.

Cuando se quedó solo con Helios, Endimión sacó un pequeño reloj de bolsillo en forma de estrella y dijo: ~Es mejor que vayas a tu lugar ya es hora...

Ausente Helios dijo: ~Si claro, no has visto a Flegonte... Helios trataba de buscarlo con la mirada.

~No, pero en cuanto lo vea le diré que vaya contigo...Endimión empujaba a Helios hacia donde sus padres estaban.

Ya casi por subir a las pequeñas escaleras que llevaban hacia sus padres se anunció la entrada de los reyes de la Luna: La Reina Serenity, El rey Cronos y su hija la Princesa Serenity.

Todos se hicieron a los lados del salón para permitirle el paso a los gobernantes de la Luna.

La Reina Serenity llevaba consigo un hermoso vestido blanco con plateado, mientras el rey Cronos llevaba su traje de gala, un traje azul marino con capa roja y grabado el símbolo de la Luna y el de un reloj en su pecho, y la princesa Serenity al lado de su madre vistiendo el flamante vestido que su prometido le había obsequiado.

La princesa Serenity se veía radiante en ese bello vestido que le amoldaba muy bien al cuerpo, con una sonrisa de oreja a oreja, en cuanto entró al salón su mirada no vió nada más que los bellos ojos azules que la esperaban al final del pasillo hecho por todas aquellas personas que se reunían para conmemorar la pedida de mano oficial.

Al llegar a la escalinata, Cronos tomó la mano de la reina Serenity y la encaminó hacia su asiento y dejó a Helios tomar la mano de la Princesa Serenity.

Los reyes del Sol y de la Luna estaban emocionados. El Rey Hiperion se levantó y todos los espectadores voltearon a verlo.

~El día de hoy es un día especial para nuestro reino y para el Reino amigo de la Luna. El día de hoy mi hijo, el príncipe Helios pedirá formalmente la mano de la Princesa de la Luna, la princesa Serenity...

Todos los asistentes estallaron en aplausos, Serenity miraba avergonzada a todos pero en especial a su amado Helios.

Helios se hincó frente a Serenity, tomó su mano y dijo: ~La vida y el destino me dieron la oportunidad de conocerte y la gran fortuna de enamorarme de ti y de que ese amor que por ti tengo sea correspondido, este día y con el Sol, la Luna y las estrellas de testigos te pido que seas mi esposa...

EL RESPLANDOR DE LA LUNA (terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora