Renuncio

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Meto las pocas cosas que tenía en una caja de libros, todo de un arrastron y me incorporo corriendo con Tyler.

—Tyler no, Tyler— me ignora y abre la puerta.

Ambos nos quedamos impresionados, Tamara esta semi desmuda sobre el esritorio de Mitcher, y él esta haciendo cosas que no son parte de la editorial.

Ambos notan nuestra presencia y tanto él como ella se ponen de pié. Tamara observa atónita a Tyler, y después me ve molesta a mi.

—Le dijiste— escupe y camina furiosa hacía mi.

—No te atrevas a tocarla, Tamara— impide Tyler que Tamara se suelte como un animal salvaje en contra mío.

—Tyler, puedo explicarlo— dice la zorra esta y Tyler no se ve triste, ni decepcionando, se ve molesto.

—No quiero tus explicaciones Tamara, no somos nada, ¿lo recuerdas?.

—Tyler, hablemos por favor, no dejemos esto así.— se excusa y no entiendo nada.

—No me interesa, para mi el compromiso termino, y si tu padre decide dejar de ser socio con la empresa de mi padre, adelanté.

—Bree Danver— por fin habla con molestia Mircher y se acerca a mi.

—Ni lo intentes imbécil— lo toma de los bordes de su saco y me asusto, Tyler fácil lo destroza—Uste tampoco debería de hablar señor, le recuerdo que sin mi padre su empresa se caera, ¿o ya olvido los grandes prestamos que aún no nos ha pagado?.

—¡Tyler bajalo!, ¡Tyler!— lo llamo y no me esucha— Tyler, por favor.

Baja la cabeza y lo suelta, sin embargo, no me observa.

Sin palabras, literalmente estoy sin palabras, Tyler le cerro la boca a todos en tan sólo unos minutos.

—Renuncio— digo sin previo aviso, se que una cosa más y Tyler destroza a este hombre— ya no quiero trabajar más para usted señor Mitcher.

—No me importa, estaba a punto de despedirte— musita con rabia. Y Tyler se le intenta acercar, cosa que no permito pues enseguida me interpongo.

—Bueno, tomelo como un salario menos por pagar, por que le recuerdo, que sus cuentas bancarias extan expirando a costa de su mala inversión y sus prestamos sin compromiso.

Dicho esto, Tyler sale del lugar y yo le sigo. Dejando atrás a ese par de idiotas. No puedo decir que me siento bien, pero tampoco me siento mal. Tomo mis cosas y me despido de Jissela, perdiendo de vista a Tyler. Sin más que perder tomo el elevador privado y cuando bajo lo veo ir a gran paso a la salida.

—¡Tyler!— grito y corro— Tyler espera.

Lo detengo ya en la salida y me observa molesto, ¿qué mierda?.

—Tu lo sabías.— escupe

—¿Qué?.

—Tu sabías que ella me engañaba.

—Tyler puedo explicarlo.

—Todo este tiempo me estuvieron viendo la cara de idiota, sólo necesitaba un buen motivo para dejarla Bree, un jodido buen motivo.

—No quería meterme en eso.

—Claro, querías salvar tu trabajo.

—No queria salvar mi trabajo, lo único que buscaba era no tarerte problemas, a ti o a tu padre, o a su empresa, no tenía las pruebas suficientes.

—Claro, ahora pintalo de otro color.

—Sabes que Tyler, velo como quieras verlo, me da igual.

Dejo la caja de estupideces que tengo en mis manos y me voy de lado contrario a Tyler.

Ahora.yo soy culpable de las estupideces de los demás, ¿yo como iba a saber eso?, si ellos parecían quererse, o eso aparentaban. Pero ya a la mierda, esto me pasa por no esperarme a entregar las cosas.

Llego a mi casa y entro, me dejo caer sobre mi cama, undiendome en un sueño profundo.

Putas ganas de hacer pipi, hicieron que me levantará al baño.
Salgo de hacer mis necesidades y veo el reloj el cual marca las 11:45 p.m, eso significa que he dormido casi 5 horas, vaya, que rápido se paso el tiempo.

Voy a la cocina por un vaso de agua y el timbre de la puerta hace que derrame este sobre mi ropa— lo que faltaba.

Sigue sonando y mi poca paciencia se acaba.

—Ya voy— seco un poco mi blusa pero no paran— MUERDA QUE YA VOY.

Eufórica abro la puerta y veo a Tyler del otro lado, no esta vez. Intento cerrarla pero la detiene.

—Bree— sigo luchando hasta que se da por vencido e inicia a timbrar nuevamente.

—No sigas, Tyler— gritó y me dirijo a mi habitación intentando ignorarlo, pero no funciona. Sin embargo importandome poco me tiro a mi cama y apago el teléfono.

<<Que madura Bree>>.

Espero unos minutos y sigue timbrando, harta me paro y ahora si le abro la puerta.

—¿Qué quieres?— pregunto en cuanto abro la puerta. Sus bellos ojos de arrepentimiento se esncuentran con los míos y me derrito, pero no lo suficiente para ignorar lo que hizo hace unas horas.

—¿Puedo pasar?— observa sus manos y veo que tiene frituras, dulces y nieve en estas— por favor, Bree.

—¿Ahora ya no tengo la culpa, o cómo?.

Deja las cosas en el escalón a mis pies y se acerca a mi. No voy a retroceder, sin embargo esta tan cerca que tengo que hacerlo, pero este me toma de la cintura y me pega a él.

—No estaba pensando con claridad— toma mi mentón y molesta observo su mirada llena de honestidad— sabía que algo así estaba sucediendo, sin embargo, me molesto que te hicieran parte de esto, con amenazas y que tu guardaras silencio, se que tu lo hacías para no verte mal, o causar un problema, te conozco, pero créeme Bree, si me lo hubieses dicho en su momento, tu y yo estaríamos juntos desde hace tiempo.

—Pero eso no te da derecho a tratarme como si yo tuviera la culpa.

—Lo sé, lo siento.

Bajo mi vista haciendome la difícil, pues desde que se puso en mis zapatos, lo perdone.

—¿Sólo venías para eso?— pregunto.

—No, también vengo a pasar una buena noche de películas con mi chica— vuelve a tomar todas las cosas y lo ayudo— entonces... ¿Ya me perdonaste?.

—Pasa antes de que me arrepienta— le digo sonriendo y me da un beso corto para después pasar, y así, iniciar con una buena noche.

Todo por tu amor ~||ADJ#2||~ ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora