❝ Los padres de Harry vuelven de la muerte y se toparan con grandes sorpresas entre ellas el encarcelamiento de Sirius Black .No tienen la menor idea de lo que ha pasado en la vida de su hijo en los últimos 11 años y poco a poco deberán ir descubrié...
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La pelirroja se acercó a su pequeño con lágrimas en los ojos.
-Mi bebe...-le susurró mientras le acariciaba el rostro-..lamento todo eso, debía ser yo la que recibiera esa maldición.
-Es lindo verte-le dijo Harry con la voz débil-. Me fui por algunas horas y no imaginas cuánto te extrañe.
-¿Tu herida? ¿Ya no sangra?-le pregunto algo aterrada mientras le revisaba con total cuidado.
El pequeño azabache no le respondió, solo intento con todas sus fuerzas poder sentarse.
-¿Porque Harry esta tan débil?-pregunto Lily al director-. Creía que solo usarían unas cuantas gotas de su sangre.
-El corte no es muy profundo-le respondió el director de Hogwarts
-¿Entonces respondame porque mi hijo se encuentra tan débil?-le volvió a preguntar mientras lo fulminaba con la mirada.
-¿Cuánto tiempo estuvo con esa herida?-pregunto esta vez James-. Harry tiene el rostro completamente blanco y dudo mucho que solo sea por unos cuantos minutos desangrándose.
El viejo director miraba a los padres tratando de encontrar las palabras más indicadas de hacerles entender el porqué Harry se encontraba en ese estado.
-No podía curarlo con Voldemort en frente-dijo con la voz tranquila-. Deben comprender que teníamos que esperar hasta llegar a Hogwarts...
-¿Cuando tiempo estuvo mi hijo con esa herida que le sangraba?-pregunto Lily mientras trataba de no perder el control.
Los merodeadores tenían una mirada asesina que podría llegar a matar a cualquiera en su alrededor.
-Estoy esperando una respuesta, Dumbledore-dijo Lily mientras sentía que la cólera la dominaba-. Necesito saber cuánto tiempo estuvo mi hijo con el brazo cortado.
El director la miro fijamente a los ojos antes de responder: -Harry tuvo el brazo cortado durante tres horas-su voz era muy tranquila y eso podía enfurecer a cualquiera.
-¡Se volvió loco!- grito la pelirroja- ¡¿Y si algo le pasaba a mí hijo ?! ¡¿Cómo pudo dejarlo sangrar durante tres malditas horas?!
-Como ya les había mencionado, no podía curar a Harry en frente de Voldemort
-¡Debió haber pensado en eso antes!-se levantó del sofá totalmente enojada-. ¡Debió haber conversado con Severus para que el pudiera curar a mi hijo!
-Snape tenía ya muchas responsabilidades acumuladas-dijo el director con seriedad-. Y no podía dejar que se expusiera de esa manera.
-¡¿Expusiera de esa manera ?!-exclamo Lily con los ojos asesinos- ¡Estamos hablando de la salud de mi hijo!
-¿Que creen que hubiera pasado si Voldemort o los mortifagos se enteraran que Snape se preocupó por el bienestar del pequeño Potter?
-¡Es solo un niño!-grito Lily ya harta de las escusas que daba el director- ¡¿Que hay de malo en curar a un niño?! ¡¿Prefirió que mi hijo sufriera?! ¡¿Que paso por tu cabeza, Albus?!
-No deje que le pasará algo malo, Lily-dijo Dumbledore tranquilamente-. El corte lo hizo Snape y el procuro que no fuera muy..
-¡No me importa el tamaño del corte! ¡Dijiste que TU lo protegerías! ¡Dijiste que TU lo traerias a salvo, pero dejaste a mi hijo en un rincón mientras sufría!-bramó Lily enfureciendo cada vez más.
-Era arriesgado, Lily-suspiro el director algo cansado de decir las mismas escusas.
Lily respiro profundo para poder calmarse pero era imposible.
-Sé que era arriesgado-siseo mirando a Dumbledore-. Pero debe entender que soy madre y lo menos que quiero es que mi hijo sufra-empezaba a sentir un nudo en la garganta mientras hablaba-. Aún me cuesta creer que tuvo que pasar por todo eso..dejo que lo torturaran, dejo que se desangrara, solo espero que nada de esto vuelva a suceder.
-Fuimos a Hogwarts , mamá-le dijo Harry para poder tranquilizarla un poco-. El director me ayudo con la herida-Lily se acercó para acariciarle el rostro-. No te preocupes, no fue tan malo.
La pelirroja lo miro a los ojos.
-Te amo hijo-le susurró y se acerco a darle un tierno beso en la frente.
