¥ Trois ¥

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Y, efectivamente, sí había un nuevo graffiti en una pared de la estación del metro, y la misma señora de ayer nuevamente reclamaba al aire ese "vandalismo" —como lo llamaba— y lo limpiaba.

Ese chico de ayer me pareció algo misterioso, o incluso tal vez sea una chica, pues andaba con la capucha puesta y no puedo asegurar nada, pero en definitiva esa persona era la que hizo el graffiti.

Justo como ayer, compré el boleto y esperé el metro. Cuando llegó fui una de las últimas personas en subir, por lo cual no pude alcanzar ningún asiento, asi que tuve que ir parado.

Al llegar a mi trabajo —diez minutos antes de la hora de entrada— todos me miraron con una expresión de sorpresa. Los días que llegaba temprano eran contados, pero definitivamente el metro se me vino bien.

Durante la tarde raramente no vinieron muchas personas, pero si una que me llamó bastante la atención

¿Por qué? Porque parecía que tenia la misma ropa de ayer del chico —porque sí, era un chico, ahora no estaba encapuchado (a menos de que no sea él la persona que ayer ví)— que ví con la lata de aerosol en el metro.

Graffiti et Livres ||Cashton||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora