Frágiles

18

Chloe

No le había contado a nadie porque llegué llorando anoche, era mi jodido secreto, por lo menos hasta hablara con Sam y me aclarara las cosas, no quería pensar mal de él, lo amo y sentía que todo esto me estaba agrietando. El muggle se había quedado conmigo hasta que me dormí, solo le había pedido un taxi a Jess para porque no quería dejarme sola al llevarla hasta su casa, ya que nuestros padres no estaban.
La alarma sonó haciéndome despertar, el clima estaba cambiando y los días se estaban volviendo más fríos, fui derecho al baño y luego de bañarme salí envuelta con una toalla, me puse lo primero que encontré en mi desordenado armario, me puse un pantalón de deporte amarillo con una franja negra a cada costado y una remera al cuerpo negra y mi campera de cuero, me peine y me maquille un poco. Al salir de mi habitación me encontré con el muggle a mitad del pasillo.

- Te falta la espada y estás lista para matar a todos – me dijo

- ¿querés ser el primero? – le pregunté poniendo cara de mala

- Prefiero un abrazo – y me tiró del brazo para abrazarme - ¿Estás mejor hoy? – me preguntó y yo solo asentí, dejo un beso en mi cabeza y me soltó para seguir bajando las escaleras.

Después de haber desayunado las delicias que nos preparaba Lucia, los dos solos ya que Jackson y Olivia no habían vuelto nos dirigimos al instituto y como no tenía que ir al hospital después de clases me fui en el Audi con Ethan.

Las clases eran una tortura, una más aburrida que la otra, las odiaba, bueno no las odiaba pero si me aburrían y mucho. Cuando por fin era hora del almuerzo me dirigí a la cafetería a reunirme con mis amigos ya que en mi última clase la pasé sola, entre en la cafetería dispuesta a comprarme una hamburguesa y papas fritas, cuando ví pasar una cabellera morada y decidí disculparme con ella.

- ¿Jess? – pregunté un poco incómoda, nunca hablaba con nadie más que con mis amigos en el instituto a menos que sea necesario.

- Si – me contestó con una sonrisa

- Hola – sonreí – soy Chloe

- La hermana de Ethan – me interrumpió.

- Emm si, solo quería pedirte perdón porque ayer el se quedó conmigo y no te puedo acompañar a tu casa...

- Tranquila Chloe – me dijo y me agarró el brazo en una caricia – en ese momento vos lo necesitabas

- Si pero interrumpí su momento y siento la necesidad de disculparme – dije haciendo una mueca de arrepentimiento

- No interrumpiste nada, solo escuchábamos música, me gustó que seas su prioridad porque al fin y al cabo la familia es lo primero – dijo con una sonrisa.

- ¿Te querés sentar con nosotros? – pregunté.

- Claro, compramos y vamos.

Y eso hicimos compramos nuestro almuerzo, y caminamos a la mesa donde estaban los chicos al llegar a ellos.

- Hey sangres sucias e impuros – dije llamando la atención de los chicos –  déjenme un lugar a mi y a ella

- ¿quién sos y que hiciste con Chloe? – me preguntó Colton señalandome con el dedo.

- ¿Qué? – reproche

- ¿te abducieron? – volvió a preguntar

- ¿pero que mierda? – pregunté

- Si, mi amiga no se junta con chicas – dijo señalando a Jess

- Capullo – dije y le mostré el dedo del corazón, Cooper y Colton empezaron a reír.