Chloe
- ¿Colton? – me preguntó papá mientras lavamos los platos por la noche.
- ¿tiene algo de malo? – pregunté
- No, claro que no, es un buen chico y siempre estuvo enamorado de vos, me resulta raro que hasta ahora estén juntos.
- ¿Por qué todos sabían lo que él sentía menos yo?
- Porque en defensa de todos sos muy distraída.
- Ja – me quedé en silenció – Estoy confundida – dije
- Es normal hija, hasta ayer él era tu amigo y hoy es ¿tu novio?
- Creo, no lo establecemos aún – dije dudando.
- Quiero verte feliz y disfrutar de la vida, confío en Colt lo conozco de niño
- ¿Eso no lo hace más raro? – papá me miró desconcertado
- ¿Por qué?
- Digo, si no funciona...
- Si no funciona, son lo suficientemente amigos como para seguir bien – le sonreí él siempre tenia la respuesta a todo.
Había pasado toda la tarde con Colt, al principio se había enojado por el comentario que hice de que nada pasaba entre nosotros, pero le expliqué que no teníamos que darle ninguna explicación a nadie y que me importaba una mierda lo que los demás pensaran y aflojó. A pesar de eso, la tarde junto a él fue divertida, seguíamos siendo amigos y llevándonos como tal, pero habían besos y cariños de por medio. Me gustaba sentir esto que estaba sintiendo, no sé si era amor, pero me gustaba después de todo Colton sabía hacerme sentir especial, con mínimos detalles. El muggle no había cruzado palabra conmigo a solas durante toda la tarde y cuando se fue a dejar a Óscar le pidió a Olivia si lo acompañaba. Me había molestado un poco siempre era yo la que lo acompañaba, pero era entendible capas quería pasar el último momento de su cumpleaños con sus padres.
Me estaba por quedar dormida cuando siento que la cama se hunde a mi lado, unos brazos que conocía bien me envolvieron en un abrazo y mi cuerpo se estremeció al sentir el aliento a yerbabuena en mi nuca. Me quedé estática. Amaba está sensación de protección, pero ahora me sentía culpable.- ¿Por qué Colton? – me preguntó Ethan
- ¿Por qué no? – respondí susurrando y con los ojos cerrados
- No me respondas con otra pregunta – levanté los hombros - ¿Y yo que? – me di vuelta para enfrentarlo
- ¿vos? – pregunté no daba crédito al reclamo que escuchaba
- Si yo, no podemos negar que algo nos pasa, no podés negar que algo te genera mi cercanía – trague grueso, su mano acariciaba mi costado – no puedo negar que me encanta acariciarte, que me encanta dormir con vos, abrazarte y besarte – acercó sus labios a los míos pero antes de que me besara gire mi cara, él no dijo nada.
- No puedo hacer esto, te quiero, me encanta esto, me encantas, pero más me gusta la familia que formamos. ¿Nos viste hoy? ¿Te diste cuenta de lo lindo que es una familia unida? – el no decía nada – vivimos bajo el mismo techo, y antes que un novio quiero una familia – se removió y se alejó sentándose en la cama
- Tenés razón, mientras vivamos bajo el mismo techo, no podemos. Eso sí – me miró – cuando ya no vivamos bajo el mismo techo, voy a pelear por estar con vos – me beso la frente y salió de mi habitación
Sonreí ante su comentario, nunca nadie me había dicho algo así y ahora tenía a dos personas dispuestas a luchar por mi amor, hay dios era muy cursi, demasiado cliché para mi gusto. Pero ahora tenía que enfocarme en Colton, al fin y al cabo estaba con él ahora.
La semana paso bastante rápido, en el instituto me había ganado unas miradas de odio por parte del género femenino porque por primera vez veían al sexy capitán del equipo de fútbol con novia, lo que dejaba a muchas chicas sin su aventura de fin de semana. Ethan se comportaba raro, no conmigo no con Colton sino con Jess, si ella hablaba mucho el se aburría y buscaba una excusa para irse, se besaban cuando él quería, y me sentía culpable, solo esperaba que él no se esté comportando como un capullo por lo que me había dicho esa noche en mi habitación.
Era viernes y tenía planeado salir con Colt, asique después de estudiar con Luca, me fui directo a casa. Me bañé y cambie, me puse unas pantis negras con unas botas largas, una pollera de volado color vino, una remera negra con un beso marcado en blanco y termine mi conjunto con una chaqueta de jeans. Me estaba maquillando cuando el timbre sonó.
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Frágiles
Teen FictionLa vida puede ser tan frágil como una copa de cristal al estrellarse contra el piso...