Solo advierto 🔞
Ethan
Después de pasar por un a tienda de 24 horas y comprar algo para no morir se hambre el domingo, seguimos viaje a la cabaña del lago. A eso de las 3 de la mañana llegamos a la susodicha, hubiéramos tardado más si hubiera respetado el límite de velocidad, pero nos apetecía llegar, aunque no me quejo el camino fue más que placentero, Chloe iba con una bolsa de papas fritas y de vez en cuando me daba alguna en la boca para que comiera, o se acercaba a mi y besaba el cuello, o el lóbulo de mi oreja, todo este juego me ponía a mil por hora, quería llegar ya por eso rebase casi todo el camino el límite de velocidad.
Al llegar, bajamos solo nuestros bolsos, por la mañana bajaríamos el resto, acá se sentía más el frío por la cercanía al agua, asique Chloe se apresuró a abrir la puerta y fue derecho hacia arriba a buscar unas mantas, yo en cambio prendí la chimenea que no solo daba valor, sino que daba la iluminación justa, busque en las alacenas y encontré una botella de vino y dos copas, dios bendiga a Jackson por siempre tener provisiones. Descorche la botella y servi las dos copas, me acerqué nuevamente a la sala y Chloe estaba acomodando una manta en el piso y varios almohadones. Me acerqué y le tendió una copa, la cual acepto con una sonrisa en el rostro, se la veía hermosa, a la luz del fuego.
- Brindo por más momentos a tu lado – dijo acercando su copa
- Brindo por una vida a tu lado – y choque nuestras copas, ambos bebimos y nos sentamos sobre los almohadones que ella había acomodado.
Sin esperar más tiempo acerqué mi rostro al suyo y la bese, suave y lento, saboreando toda su boca, mi lengua entró en acción y jugó con su lengua. Cuando me editamos aire me separé y deje nuestras copas a un costado, volví a besarla sus manos subieron por mi abdomen y desprendieron uno a uno los botones de mi camisa a cuadros, una vez que me la saco, fue mi turno de sacarle esa remera de Nirvana que le quedaba tan jodidamente sexi, gruñi al ver un sujetador de encaje negro muy revelador, la traje más hacia mi mientras besaba sus labios su cuello, su mandíbula y de vuelta a sus labios. Me recosté sobre el piso obligándola a quedar medio encima mío, mis manos fueron derecho a sus pechos, en cuanto los acaricie ella gimió en mis labios. Incremente la velocidad con la que la besaba, pero necesitaba más de ella, su mano se posó en mi torso desnudo y comenzó a hacerme caricias con la punta de sus dedos, de arriba hacia abajo, subía y bajaba, torturandome. Su mano bajo hasta la cinturilla de mi pantalón y se coló entre mi ropa llegando directamente a mi erección, comenzando a acariciar, ahogue un gemido en su boca y le saque el sujetador con mi boca atendí a su pecho izquierdo que estaba tan erecto y caliente, se mordió la mano para que no la escuchará gemir, y solté su pecho.
- Oh no mi amor, quiero escucharte, que no te contentas, quiero escucharte gemir mi nombre – confesé y su respiración se entrecorta más.
Su mano volvió a moverse dentro de mi pantalón y gemi alto, entonces ella se mordió el labio inferior.
- Joder amor me vas a ser venir antes de poder ahhh
No quería venirme en su mano, quería sentirla estar dentro de ella necesita escucharla gemir mi nombre. Saque su mano de mi pantalón y la tumbre a ella sobre el piso. Le desabroché y saque de un tirón su ropa dejándola completamente desnuda, desabroché mi pantalón y me despoje de ellos, saque de mi mochila un condón y me lo coloque, dos segundos después estaba acomodado sobre ella, entre sus piernas. Volví a besarla y me introduje en ella de un movimiento, se aferró de mis hombros, con un suspiro. Comencé a moverme dentro fuera, la fricción era exquisita, me volvía loco, ella me volvía loco, a mi tenerla abajo mío gimiendo mi nombre, suspirando o diciendo cosas incoherentes, amo que me pidiera más, que sus uñas se aferran a mi, me gusta morderle y chupetearle la piel. Me gusta ver cómo le resaltaba la piel cuando el sudor se hace presente. Amo ver el rebote de sus pechos con mis embestidas y como se aprieta al rededor de mi antes de llegar al orgasmo. En simples palabras amo todo de ella. No solo en la cama, después y durante el sexo, sino también amo verla dormir, como ahora. Cansada después de extrañar tanto el roze de nuestros cuerpos. Seguimos tumbados en el suelo frente al casi extinguido fuego, ella acurrucada a mi lado. Busque mi boxer y de entre mis cosas saque mi remera que dice "Muggle" y se la coloque, la carguen en mis brazos hasta la habitación de arriba, a esa donde habíamos hecho el amor por primera vez, me asegure de que este cómoda y me acosté junto a ella, no sin antes acurrucarla junto a mi.

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Frágiles
Teen FictionLa vida puede ser tan frágil como una copa de cristal al estrellarse contra el piso...