Buenas noches lindas damitas, ya estamos en vísperas del estreno y muero de la felicidad!!! 🎉 🎉 🎉 🎉 😱 😱 😱
El motivo de publicar hoy es porque quiero preguntarles si van a querer un descanso de este fic para que puedan disfrutar a plenitud de la sexta temporada.
Yo en lo personal confieso que mañana en la tarde habré terminado de verla por completo 😂 😂, pero no se si ustedes se la llevarán con calma, me gustaría que me dijeran sin quieren que siga publicando con normalidad o si quieren esperar dos o tres semanas, comenten y haré lo que diga la mayoría.
Les dejo este capitulo cortito jaja quería que fuera más largo pero con la emoción y los promocionales del estreno me distraía todo el tiempo. 😬😬
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Esa noche Alex zarpó hacia su reino, velando desde la distancia a su hermoso destello de luz, a la deriva, acompañándola con el corazón sin saber a donde pero con la esperanza de pronto verla otra vez.
Madame la despidió con todos los honores y ofreció sus sinceras disculpas por el incidente ocurrido, no dio muchas explicaciones obviamente pero le garantizó que su hermosa damita cumpliría su promesa y regresaría en el tiempo acordado.
Eso le dio confianza, aquella mujer le inspiraba la seguridad que necesitaba y de momento con eso bastaba. El recuerdo de sus labios y su mirar serían su motivación para esperar, su razón de alegria en los días venideros, y aunque sabía no sería fácil, confiaba en Piper, la atracción mutua era evidente y las intenciones claras, algo las unía y tenía la certeza de que eso no cambiaría.
Einar – Alteza! Que alegría verla… que felicidad que hayan regresado!, decía aquel hombre emocionado al ver a Alex, a su hija y a los demás llegar al castillo. – pensé que estarían más días fuera, ¿ha disfrutado del viaje? ¿ha salido todo bien?
Alex—Einar, dijo con una dulce sonrisa mientras se acercaba a él y le brindaba un fuerte abrazo. – todo ha salido de maravilla, es el viaje más bello y hermoso que pude haber hecho.
La felicidad de Alex era evidente, tanto que Einar se sorprendió por dicho gesto, Alex siempre había sido cariñosa con sus más allegados pero hacía mucho que no mostraba tanto entusiasmo por algo.
Einar- eso veo alteza, respondió viéndola a ella y a Nick, tratando de descifrar que era aquello que tenía a su reina tan feliz.
Alex – tenias razón cuando me sugeriste ir a las islas, continuó tomándolo del brazo y caminando por el patio, - quería distraerme un poco y terminé haciendo algo mejor…
Einar- que hizo alteza? Preguntó contagiado por el entusiasmo de Alex.
Alex—me enamoré, dijo orgullosa. - Me han robado el corazón Einar, ¿puedes creerlo?
Einar abrió sus ojos sorprendido por lo que le decía, ahora era evidente la luz que irradiaba de la mirada de Alex, lo veía, era diferente, brillaba como nunca antes y la sonrisa que la acompañaba confirmaba la noticia.
Einar- ¿se ha enamorado alteza? Cuestionó curioso, ¿de una dondella? ¿Extranjera?
Alex—así es Einar, es extranjera, se llama Piper y es la mujer más hermosa que he visto en toda mi vida.
Einar – ¿y ella corresponde a sus sentimientos alteza?
Alex—si, sonrió al recordar el beso que le dio al despedirse, - soy correspondida Einar.
Einar – oh alteza que felicidad escucharla! , me alegro mucho por usted. Si esa doncella la quiere será más que amada y bienvenida por todos nosotros.
Alex—lo sé, espero que algún día pueda venir para que la conozcas. La expresión de Alex se puso un poco sería al decirlo, estaba dando por hecho algo que no sabía siquiera si sucedería.
Einar- ¿ porque lo dice en ese tono mi reina?
Alex—ven, te contaré como paso todo.
Esa tarde Alex le contó a Einar, a Fahri y al resto todo lo sucedido y aunque por momentos la incertidumbre le ganaba, todos le aseguraban que no debía preocuparse y que si esa doncella la quería como decía, cumpliría su promesa. Además, Einar también confiaba en Reznikov, si ella garantizaba que Piper volvería tenía que ser verdad, pues sabía que no haría nada que perjudicara a su reina en ningún sentido.
Después de eso, Alex pasó los días ocupándose lo más posible para no desesperarse y salir corriendo a buscarla, era increíble el impacto que esa rubia había causado en ella y todos lo notaban, pues su simple recuerdo le causaba una enorme sonrisa que podía durar horas y lograba tenerla con un excelente humor durante dias.
Aún quedaban algunos días de caza así que se dedicó a eso, a recibir a vasallos y pobladores con sus mejores ejemplares y asegurarse que todo estuviera en orden.
Alex era una excelente gobernante a pesar de su edad, era responsable, atenta y amable con su pueblo, pero también tenía el carácter y la determinación para hacer valer la justicia y sus leyes, pues nunca faltaba alguna disputa o inconformidad entre los lugareños que llegara a situaciones delicadas, y si se requería de la intervención de la corona para solucionar el problema Alex daba su resolución o veredicto final con sabiduría, buscando siempre lo mejor para su gente, aunque a veces eso significara castigar o sentenciar a muerte a los culpables.
Solo tres delitos eran castigados con tal severidad, siendo estos las violaciones, los asesinatos injustificados y la alta traición, pues los tres representaban deshonor, deslealtad y cobardía, algo intolerable para un pueblo guerrero como el Vause.
