Capitulo #1 Ciudad de Vancouver (Canadá) EN LA ACTUALIDAD

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Mi cuerpo iba en caída libre, una fría sensación recorrió por mi espina dorsal.

El despertador hizo su trabajo, me despertó de esa pesadilla que me atormentaba una y otra vez como si no hubiera un final.

Respire profundamente, sabía que solo había sido un sueño pero tenía miedo de que fuera real, tanto que me era imposible sacarlo de mi cabeza. Mire el día en mi móvil, era mi cumpleaños.

Tenía pereza de salir al mundo convertida en una chica de mayor edad, pero que más podía hacer era mi cumpleaños número 18.

Soy Hope Brooks, hoy cumplo 18 años. Soy estudiante de quinto año de Periodismo en la universidad de British Columbia. Trabajo como pasante en el área de noticias locales en el diario más importante de Vancouver "Vancouver Sun", es mi diario favorito y aspiro algún día formar parte del equipo de forma permanente.

Pero no todo eso es lo que soy, hace 6 años antes cuando tenía 12 años tuve un accidente que me mantuvo en coma por un año y medio. Al despertar no podía recordar quien era o quienes eran familia; casi todos los días me pregunto cómo demonios tuve ese accidente, pero por más que trato de recordar me es imposible.

Después de despertar, los doctores estaban sorprendidos porque ellos ya me daban por muerta; el accidente que tuve a esa edad era para no haber despertado nunca del coma, así que lo doctores habían tomado la decisión de desconectarme al ver que no despertaba.

Pero no solo ellos se llevaron esa sorpresa, unos meses después de darme el alta. Sentí que hubo un ligero cambio en mí, tanto que fue una sorpresa que hasta ahora me cuesta creerlo. En mi cumpleaños número 14, mientras trataba de recuperar mi memoria empecé a darme cuenta que podía hacer cosas que los demás niños no podían.

Al inicio me aterre y tenía miedo del cambio que había sufrido pero con el tiempo fui acostumbrándome.

Es verdad, suena loco que después de despertar de un coma por causa de un accidente que ni tú mismo puedes recordar, y que los doctores le dijeran a tu hermano que podrías perder la memoria de forma permanente, es decir nunca recordar, que ahora tengas "poderes sobrehumanos". Eso sí es de locos.

Desde mi punto de vista es un poco gratificante e intrigante pero al mismo tiempo no. Porque, muy fácil.

Siempre desde niña fui la mira de los brabucones y de las chicas populares en la preparatoria. Tanto que era el "bicho raro" que ellos odiaban ver. Si era una friki y que tiene de malo, bueno en realidad no era tan friki. Pero ellos pensaban así.

Para cualquiera le hubiera sido un shock que de la noche a la mañana la chica "bicho raro", la friki pase a ser la chica con poderes era casi imposible que sucediera eso.

Así que cuando me di cuenta que tenía poderes, tuve la tentación de devolverles todo el bullying; pero después reflexione al respecto y preferí pasar desapercibida. Ahora que tengo estos poderes, a veces los uso para mi beneficio personal como también para ayudar a las personas.

Mis padres son unos científicos que han ayudado mucho con sus aportes e investigaciones científicas para que el mundo siga su desarrollo en la "inteligencia avanzada", aunque ellos no tengan una reputación de "nivel mundial" y tampoco tengan un premio "Nobel", para mí son los más grandes científicos. Mi hermano mayor por otra parte el también decidió llevar la misma vida que mis padres, así que viaja por todo el mundo así como ellos.

Una vez que emprendí a controlar mis poderes, decidí que era más que prudente ocultarlos de ellos así como de mi hermano. Porque si ellos tres se dieran cuenta, era más que obvio que me iban a convertir en su sujeto de investigación para toda la vida.

GUARDIANS OF DESTINYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora