GUARDIANS OF DESTINY

CAPITULO #26

Despertándome al sentir una ligera brisa en la cueva, Sam me dio un tierno beso en los labios.

-Buenos días, bella durmiente.

Sonriendo ante su saludo de buenos días, lo abrace.

-Todo esto me parece un sueño. -dije muy animada

Sam acariciando mi cabeza, sus ojos brillaron de ese color negro y purpura.

Aine observando a sus nuevos compañeros, rio al ver que Rachel era su tutora.

Retornando al Genesis junto a Sam todos animados por su regreso, Randall y Reéne no se encontraban de igual forma. Aguardando Reéne que todos regresaran a sus actividades, ambos se reunieron con Sam en la sala común.

Sam extrañado por la actitud de ambos, Randall cerró la puerta con seguro detrás de Reéne.

Reéne con la cabeza agacha, abofeteo a Sam.

- ¿Reéne?

Randall esquivando la mirada de Sam, suspiro.

-Porque lo hiciste, Sam. -exigió Reéne entre lágrimas. - ¡Explícate!

Sam empuñando las manos, guardo silencio.

Randall hastiado, se le acerco.

-Sea cual sea el motivo nos dirás después, por ahora debes saber algo. -indico Randall con seriedad. -Nueve meses antes el Genesis fue atacado cuando Marshall los envió a ti y Hope a Hisguions, muchos novicios perdieron la vida y... Marshall también murió.

- ¿Qué? -miro Sam en blanco a Randall

-Como escuchaste... él está muerto. Ya ha pasado cuatro meses desde que murió y mientras estabas ausente, Hope se convirtió en la matriarca de los Castmers y en la directora del Genesis; pero por ahora Lesquín es su regente mientras Hope trata de llevar sus obligaciones como Castmers y su vida como terrestre.

Reéne observando a Sam, le abrazo.

-Quizás Hope no te lo habrá comentado porque seguramente no quería que te sintieras responsable por las cosas que sucedieron mientras estuviste ausente. -explico Reéne con tristeza. -Pero seguro te lo iba a contar más adelante, cuando el tiempo lo dispusiera.

Randall percibiendo que alguien se acercaba a la sala común, tomo a Sam por lo hombros.

-Escúchame con atención, hermano. -expreso Randall un tanto frenético. -Pase lo que pase no puedes confiar en nadie, ni siquiera en ningún guardián más que en nuestro escuadrón. ¡Entendiste! Fue la última petición de Marshall antes de morir, así que no lo olvides.

Sam desconcertado ante la advertencia de Randall, asintió.

Aine observando a Sam mientras cenaba en el gran comedor, rio con malicia al sentir el poder Deslyst tratando de controlar su mente.

-Creo que es hora de los juegos mentales. -susurro triunfante

Los días continuaron con normalidad en el Genesis, Lesquín llevaba a cabo sus deberes como regente con excelencia. Por su parte los muchachos se cuidaban las espaldas de los guardianes y los novicios.

Aine por su parte cuando percibía que el poder Deslyst trataba de controlar a Sam, lo manipulaba, provocándole alucinaciones tratando de poder dominarle. Pero Sam demostrando resistencia ante el poder Deslyst, ella se enfurecía.

Rachel visitando un día la oficina al ver que los esfuerzos de Morgana por controlar a Sam no surtían efecto, le sugirió a Lesquín que Sam debía ser el tutor de Aine, ya que nuevos novicios estaban ingresando a la academia y él necesitaba reincorporarse lo antes posible; una petición muy convincente que Lesquín no pudo negarse.