Butterfly 🦋 Kaneki/Haise

🦋 24

Tras una extensa pelea, Shirazu clavó su quinque en el vientre de Cascanueces, matándola.

– Yo quiero ser...bonita... –murmuró, antes de fallecer.

Ginshi la miró y cayó al suelo, sentado.

– ...Deja de decir cosas...como si fueras humana...

Tn comenzó a aplaudir sarcásticamente. El pelinaranja se levantó y tomó su quinque nuevamente. Ella rió y saltó hacia Saiko, tomándola desde atrás por el cuello.

– ¡Saiko!

– Me tocas y la niña muere –amenazó.

Él soltó su quinque y levantó las manos. Tn sonrió de lado y caminó hacia la salida con cautela, de espaldas. Los gritos de Haise resonaron por las bocinas de las cámaras de seguridad, sobresaltando a los tres.

«Ese es...Haise...», pensó.

La ghoul tomó a la pequeña peliazul en brazos y la arrojó hacia su compañero, para luego correr; él logró atraparla, pero ambos cayeron.

– ¿Estás bien?

– S-Sí... –miró a las pantallas.– Esos gritos...Es Mamman...

Tn corrió, hasta llegar al salón de donde provenían los gritos, pero al mirar dentro vio a Hinami peleando con Takizawa.

«Hinami no...Aogiri ya está retirándose, y el CCG ha rodeado todo el lugar...debes irte...», pensó.

Tragó saliva. No sabía si entrar a ayudar a Hinami o irse antes de que alguien la viese. Observó el lugar, encontrando a Haise.

«¿Por qué lo protege? ... ¿Estaba en lo correcto después de todo...?», pensó.

Oyó a varias personas acercarse y frunció el ceño.

– Lo siento Hinami... –murmuró.

Tomó aire y comenzó a correr, alejándose de allí.

[Diciembre 24]

La época navideña llegó rápidamente. Y en el tiempo transcurrido desde la Subasta, Tn y Haise habían estado muy poco en contacto, sólo se enviaban textos de vez en cuando o se llamaban, llamadas que no duraban mucho; además, no habían vuelto a verse en persona.

Tn salió de la tienda y caminó a casa. Al llegar, guardó lo comprado y comenzó a limpiar. Al terminar, se metió en la tina con agua caliente y espuma, colocó música desde su teléfono y se relajó, leyendo un libro. A los minutos, su teléfono comenzó a sonar; curiosa, lo tomó y observó la pantalla: "Haise Sasaki". Dudó un momento, pero finalmente contestó.

– ¿Hola?

– Ah...Srta. Tn. Buenas tardes.

– Hola. ¿Cómo estás, Haise-san?

– Uhm. Bien. Verás...Quería saber si...uh...

– ¿Sucedió algo?

– ... ¿Estás libre...esta noche?

– ¿Esta noche? –repitió.

– Sí. Verás...Tendremos una cena, es decir, yo, mi escuadra y algunos amigos del CCG.

– Entiendo...

– Y...bueno, pensé que tal vez... ¿Te gustaría acompañarnos...?

– ...Haise-san...Es muy amable de su parte el invitarme, pero...ya tengo planes para hoy.