Capitulo: VIII

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5 semanas después.

Ya pasaron cinco semanas desde que me converti en una favorita y desde entonces hasta hoy he visitado todas las noches los aposentos de Mehmed.
La vida en el Harem me es caótica en el hecho de aguantar las quejas y la envidia de todas en el, hago lo imposible por que no me afecte y no afecte a Irma.

-T/N , me escuchas?-Me hablo enojada Irma.

-Perdona Irma estoy cansada-talle mis ojos- toda la noche tuve pesadillas y no descanse nada.

-Si quieres puedo pedir que te hagan un té para dormir.-me sonrió

-Irma no soy una Sultana para que mandes a pedir cosas a mi nombre.

-Pero lo seras te lo aseguro.-se levanto para dirigirse a la salida.

-No prediques nada Irma la Profeta de Allah-me reí y ella solo me dijo : "Veremos" para salir de mis aposentos.

Me recosté sobre mi lecho no podía quejarme tenia casi los mismo lujos que cuando era prometida de Juan, tenia mi propia cama caliente, un armario donde cabía todo lo que Mehmed me regalara y un tocador.
Pero me era tan abrumador era exactamente a mi vida como Duquesa de Alicante, me quiero ir pero no puedo, tengo un deber aquí y es darle un hijo a Mehmed y cuentan conmigo Irma,Mehmed y Madre y no se si lo logre.

-Maldito sea el día en que nací siendo niña y maldita sea mi suerte por no morir y maldigo a todos en especial a mi madre por hacerme quien soy!- grite en español.

Tocaron la puerta- adelante.

Abdullah Aga entro con una sonrisa en el rostro.

-Mahidevhran Hatun...

-Abdullah Aga, ¿Qué se le ofrece?-pregunte acercándome al eunuco y aga de la Sultana Häshämärshä

-Su gran alteza la Sultana Häshämärshä requiere su presencia en sus aposentos.

Abrí mis ojos con sorpresa pues la ultima vez que la vi fue para recibir su felicitación por volverme favorita, pero el ambiente era tenso había una tensión que sentía más al verla a los ojos y que por alguna razón odiaba verla hablar y ver esos labios carnosos moverse y yo como idiota viéndolos.

-Maldita Häshämärshä -dije en español y Abdullah me miro raro- Nada, vamos con la Sultana Abdullah Aga.

Salí primero del cuarto bajando a prisa al piso del Harem mientras el aga moreno me seguía con prisa. Yo por alguna razón que desconozco me encontraba ansiosa y emocionada por ver a Häshämärshä estas sensaciones junto a otras no las había sentido nunca y me hacia querer vomitar. Al llegar entramos y nos reverenciamos.

-Mahidevhran-temble al oirla- te ves muy bella el día de hoy.

-Gracias Sultana pero hoy usted luce mucho más radiante que yo- lo dije con demasiado gusto a mi parecer y me sonroje oírla reír.

-Retírense todos debo hablar a solas con Mahidevhran...-dio un suspiro que me erizo todo los pelos pues la ultima vez que dijo eso, bueno yo y la Sultana....hicimos algo que esta prohibido

-Si Sultana...-dijo Abdullah y  mantuve mi cabeza baja hasta oír como la puerta era cerrada.

Levante mi rostro para ver su perfecto rostro trigueño sonriente y esos ojos verdosos con un brillo extraño con los cuales me recorrió de pies a cabeza y se levanto de su sillón para caminar hacia mi.

-Puedo ver en tú rostro que no has dormido mucho anoche-se balanceo de un lado al otro- ¿Pesadillas?

-Sí.
-¿Sobre?- se acerco más a mi
-No lo recuerdo Sultana-la mire a los ojos- pero eran terribles.

Häshämärshä se acerco a mi y me tomo del brazo atrayendome a ella.

-No estés nerviosa, no haré nada que tú no quieras.

-S-Sultana, ¿Pare que me ha pedido?-pregunte.

-Mmm por nada en especial simplemente queria verte, ¿ acaso no puedo?- ella paso su brazo por detrás de mi cintura atrayendo más nuestros cuerpos- ¿Acaso te molesta verme?

-No es eso Sultana, solo creí que...- Rayos no sabía que decir.

-Ya ni sabes que excusa ponerme T/N- me susurró.-  no por ser la favorita  de mi hermano significa  que eres exclusivamente  de él - alzo mi barbilla con su dedo índice y me sonrio con picardía- Todos tienen derecho  a desear tú belleza y de desearte  a ti.

-Sultana...-mordí mi labio al ver que acerco su rostro a centímetros del mío.- n-no lo haga.

-¿ Temes que vuelva a pasar lo de la última  vez ?- asentí - Oh mi hermosa T/N-me daba cosa que me llamase por mi verdadero nombre el cual me había preguntado la segunda  vez que nos vimos- mi bella T\N lo que paso una vez, volvera a pasar es inevitable, tú me haces inevitable el desearte y el desear tús labios- suspiro sobre mi cara y nos miramos, me perdia en sus ojos- Y yo soy la Sultana Häshämärshä y consigo  todo lo que quiero.

Sin dejarme responderle choco sus labios contra los mios moviendolos tan dulce que me derritia entre su agarre, puse mis manos en su pecho dejandome llevar por aquel sentimiento de cosquilleo en mi estómago y mis temblorosas manos con este sentimiento  que no siento con Mehmed  ,  me perdí cuando llegue entre ese beso hasta la cama donde quede en blanco.

En blanco, cediendo ante aquel sentimiento tan incorrecto.

Cediendo ante lo prohibió...

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Hola :'v....
Ya se esta corto el capítulo y muy... Weno ya saben.

Estoy triste muchachas falleció mi gatito bebé  :'v llore toda la tarde pero decidí tragar mi dolor y terminar este capítulo...

Espero y les haya gustado el capítulo.
¿Qué les parece esta "relación " entre Häshämärshä y T/N?

No olviden  comentar, votar y compartir si les gusto.

Atte: Haseki EvelynKim084 Sultán 💟

Perd

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