Palabras

41 tequilas e incontables cigarros

Largas. Largas noches de invierno sin tus abrazos, y aún así, el calor del verano no pueden darme un arropo. Que 32 tequilas y 24 cigarros de buenas noches no han servido para olvidarte, solo para recordarme que estoy solo, sentado junto a la ventana, pensado en como lo jodí todo y me quedé con las ganas de bajarte las bragas. La vida te lanzó a la mía para que me destrozaras y compensara las putadas que una vez hice. Supongo que a eso se lo llama Karma, ahora lo entiendo cuando dicen que la vida es una simple hija de puta. Sigue siendo julio y ya e tomado el tequila 41 y he fumado incontables cigarros solo para soñar entre tus piernas y follar mi propia mano. Que recuerdo cada detalle del día que te conocí, recuerdo que el reloj marcaba las once y cinco de la noche, que era abril, el sonido de tus tacones chocando con el suelo, el sabor de tu sonrisa después de un whisky, la frase que susurraste cuando mi miraste de arriba abajo:

“¿Te apetece un tequila y un cigarro?”