Flor Eterna © (The walking dead 3.5)

Jamás

EJamás

En pocos minutos casi todos los habitantes de la prisión estaban despiertos y un gran número salía de los pabellones para ocuparse de las vallas, pues la situación era insostenible, según habían informado Julio y Scott.

—Mara, ¿Por qué no te quedas...? —comenzó a decir Hershel.

—Ni hablar... —le ignoró la joven, yendo tras Daryl.

El hombre no insistió viendo también como sus hijas salían. Rick entregó a su hija, que se encontraba llorando nerviosa ante todo el jaleo ocasionado que había interrumpido sus sueños.

—Cuida de tu hermana —le dijo a su hijo mayor, entregándole a la pequeña.

—Yo puedo... —comenzó a quejarse el muchacho.

—Carl, cuida de ella —repitió con autoridad.

El muchacho cogió en brazos al bebé, que le abrazó con sus bracitos desconsolada sin parar de llorar, y bajó la cabeza derrotado, entrando en su celda. Su padre salió siguiendo al resto.

En el exterior Carol y Karen repartían las varas y cuchillos, juntos con guantes y delantales para protegerse a los que iban a acabar con los caminantes. Mara se acercó para coger un par de guantes, pero Daryl continuó armado con su propio cuchillo de caza sin tomar ninguna protección.

—Van a tirar las vallas —dijo Sasha cuando su compañero llegó hasta ella.

Los primeros en llegar al vallado comenzaron a acabar con los caminantes que había en primera línea, pero era casi inútil, la presión que ejercían los que estaban detrás impedían que los cuerpos cayeran al suelo, y poder acabar con los del fondo, que eran los que presionaban la alambrada.

—Tenemos que moverlos de aquí —dijo Daryl.

—Es demasiado tarde para eso —aseguró Five.

Cuando Rick llegó hasta las vallas, Daryl le miró, esperando que a su antiguo líder se le ocurriera algo, pero éste solo pudo mirar la horda de caminantes que se agolpaban frente a él, sin poder encontrar una solución.

—¿Qué hacemos? —preguntó Glenn

—Lo que sea hay que hacerlo ya —aseguró Sasha.

En esos momentos corroborando la impaciencia de Sasha la valla cedió levemente ante el empuje de los caminantes. Mara ,que había estado encargándose de acabar con algunos cerca de Rick, fue empujada por el policía hacia atrás.

—¡Cuidado! —la apartó.

Five al verlo abandonó al grupo formado por los integrantes del consejo corriendo hacia ella.

—¿Estas bien? —preguntó comprobando sus brazos —Hay que salir de aquí, ¡Se va a venir abajo! —Gritó advirtiendo al resto.

—No podemos dejar que caiga —le contradijo la joven —. Podemos hacerlo —aseguró, mirando a Rick y esperando su apoyo.

—Si cae será más difícil controlarlo —aseguró éste por fin tomando parte.

No era el momento de ponerse a discutir con nadie, así que Five tomó una rápida decisión y volvió de nuevo junto a Daryl y los otros, a los que se había unido Carol también.

—Desde aquí no podemos matarlos, dejar que Poker y yo subamos a las torres y les disparemos —propuso —Será ruidoso, pero en unos minutos no quedará uno en pie.

Los cuatro compañeros se miraron. Habían intentado evitar hacer ruido pero ya no había alternativa posible. Uno por uno comenzaron a asentir, apoyando la propuesta de Five. Sin esperar que le dieran la orden a viva voz, el militar silbó dos veces seguidas, haciendo que Poker se diera por aludida y dejara de empujar las vallas junto al resto, al mirarle Five le hizo dos gestos con la mano que su compañera comprendió inmediatamente y corrió a por las armas.