Flor Eterna © (The walking dead 3.5)

Noticia

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Las dudas se disiparon por completo en la mente de Mara, dando paso a un torbellino de sentimientos, algunos de ellos encontrados.

Siempre, durante toda su vida la maternidad había formado parte de su personalidad, de ella misma. Y en la ultima década ese deseo frustrado le provocaba un dolor profundo en el alma. Muchas habían sido las noches en las que lloraba en la cama por el hijo que había perdido y por los que ya no tendría. Por no poder desarrollar esa vocación natural que siempre había tenido. Instintivamente posó sus manos sobre su vientre y por primera vez fue consciente por completo de la nueva situación.

Durante unos segundos no pensó en nada que pudiera ser malo, dejándose llevar por la idea de que una pequeña vida, creada por Daryl y ella estaba creciendo en su interior. Al pensar en ello, se vio inundada por un sentimiento de amor profundo, de ilusión y de fuerza. Era tan extraño querer a alguien que no conoces segundos después de saber que existe, tan extraño y tan natural. Pero tras ese momento, y a causa de sus ilusiones egoístas volvió a sentir una gran culpabilidad hacia Daryl y el lugar en el que le había dejado, no sabía como tomaría la noticia. Eso le hacía sentir miedo.

Podía ser que Daryl no quisiera aquello, que le pidiera que no lo tuviera, aunque no lo creía. Pero con seguridad la confianza que él tenía hacia ella se acabaría, por hacerle creer que no había problemas en que no tomaran precauciones. Además de todas las complicaciones que traería su estado.

Un pensamiento terrorífico le martilló la cabeza y despertó de sus pensamientos, dirigiéndose a Caleb con ojos desesperados.

—Llevo dos días con pinchazos —confesó, ahora que lo sabía no quería perderle —. Calculo que estoy de poco más de cinco semanas, y no he tenido ningún cuidado...

—Tranquila, te reconoceré —aseguró Caleb, y fue a cerrar la puerta de la enfermería para no ser molestados.

—Aunque me haya quedado embarazada no quiere decir que pueda tenerlo —dio voz a sus miedos —, es posible que lo pierda...

—El primer trimestre es el más difícil, pero no tienes que tener miedo de eso —aseguró el médico —. Eres activa, eso es bueno para el cuerpo y su resistencia. Tendrás que bajar el ritmo y no hacer esfuerzos. Claramente se acabó lo de entrenar...

Eso la hizo pensar en Five y sintió un escalofrió recorriendo su cuerpo, peor que decirle a Daryl la noticia sería confesar ante Five. Suponía que el conocía que no podía tener hijos, aunque jamás se lo dijo ella misma. Pero era indiferentes. Cuando lo supiera... la acusaría de no haber cambiado, de cometer el mismo error, de ser una inconsciente y una irresponsable y la trataría como a una adolescente de nuevo, dejando de escuchar su opinión y deseos. Si Five se enteraba haría todo lo posible por llevársela cuanto antes, o incluso podría intentar obligarla a abortar. Porque no podía descartar el hecho de que con las carencias medicas que tenían morir en el parto era una posibilidad. Le había pasado a la madre de Judith y Carl...

—No se lo digas a nadie —pidió desesperada, atrayendo la atención de Caleb que estaba reconociéndola —. Voy a seguir adelante con ello y a cuidarme. Pero no le puedes decir a nadie nada... no hasta que pase al menos un tiempo.

Caleb asintió y continuó adelante. Mara y él pasaron más de una hora dentro de la enfermería. Hablando sobre que debía tomar a partir de ahora y lo que podía o no podía hacer. Mara era un miembro activo del grupo, apartarla de sus labores o de las salidas llamaría demasiado la atención. Ella tomó la decisión que mientras fuera rutinario y seguro seguiría saliendo y tendría más cuidado. Dejaría de hacer esfuerzos, pero no se quedaría en reposo.

Caleb estuvo de acuerdo con ello, lo mejor era mantenerse activa para que su cuerpo estuviera fuerte para soportar los cambios de los últimos meses de embarazo si llegaba a termino. No quería asustarla, pues había percibido que aquella noticia le ilusionaba más que otra cosa por extraño que pareciera. Pero si había tenido lesiones uterinas era muy posible que se malograse y sufriera la perdida del feto.