Nailah, La viajera del tiempo

Prologo

Desde que era niña siempre habia oido de las fascinantes historias de la enviada por los dioses, Siti de Egipto y Marcus el general romano, quien en realidad resulto ser Dairine la que viajo en el tiempo por la estupidez de sus amigos y bueno, resulto ser que Marcus si era un general romano aproximadamente del siglo VI a.C, quien bueno en teoria ya deberia estar muerto desde hace, mucho, mucho, pero mucho tiempo, pero resulta que el romano se enamoro de la diosa que en realidad no termino siendo una diosa si no una simple maestra de historia quien es buena luchando y que debido a la enfermedad de su padre, que es mi abuelo, ella tuvo que viajar pero regresar en el tiempo y como él romano estaba perdidamente enamorado de ella viajo con ella a su era... Si algo totalmente normal y cotidiano.
A veces no podia creer lo ingenua que habia sido de niña como para tragarme tal historia tan... ¿peculiar?, ¿original?... En fin, ese intento de historia de amor.

No importaba cuanto preguntara, cuanto exigía y hacia berrinches por saber lo que realmente habia pasado, mis padres siempre, siempre, pero siempre me contaban la misma historia, sobre viajes en el tiempo, gente muriendo, amazonas, un emperador pervertido, un faraon obsesionado con mi madre, un tal Isaac envejecido y muchas mas cosas que aunque me causaban bastante gracia, sabia que no era reales. Pronto entraria a la universidad y no sabria por cuanto mas mis padres seguirian tomandome por ingenua, era obvio que seguia siendo una niña incredula e ingenua para ellos, como para que cada vez que preguntara me siguieran contestando lo mismo como si fuese a creermelo como la primera vez...

Pero ahora, mas que nunca,estaba dispuesta a encontrar la verdad de aquellas simples historias.