—¡Vístete rápido Joshua! —como aún conservaba la camiseta puesta, me puse los bóxers rápidamente para salir de la habitación y bajar por las escaleras.
—Estás loco si crees que abandonaré esta habitación. —Josh seguía metido en la cama y no dejaba de frotarse el rostro con desesperación.
Habíamos sido atrapados por mi hermana Maddy. Olvidé por completo que vendría a mi casa a cierta hora para llevarse a Violet de paseo. Seguramente estuvo llamando a la puerta varias veces y al no obtener respuesta, me contactó a mi celular, sin respuesta también, porque había dejado que sonara mientras estaba en la cama con Josh. Jamás olvidaría la expresión en el rostro de mi hermana.
Su boca estaba completamente abierta de la sorpresa, sus ojos lucían más grandes, su postura era rígida y entró en un estado de shock de por lo menos 5 segundos. Después del "¿qué rayos estás haciendo Tyler?", no dijo nada más. Se quedó observando y cuando sus sentidos volvieron a su cuerpo, reaccionó y dio un giro para huir de ahí. Yo tampoco había sido capaz de contestarle algo de vuelta por el shock, ni mucho menos Josh. Solo sentí como mi corazón se hizo añicos al ver a alguien de mi familia juzgarme con una mirada que claramente expresaba disgusto o decepción. Si me hubiera cachado estando con una chica, y no un chico, la historia sería diferente.
Sus ojos demostrarían vergüenza y no asco. Se hubiera incluso hasta disculpado por interrumpir. Tal vez luego me llevaría un gran sermón por su parte por haber decidido mantener relaciones sexuales con la niña durmiendo en la habitación de alado, pero eso sería todo. Luego me cuestionaría para saber quién era la chica y cuál era mi relación con ella. Conociendo a Maddy, estaría feliz de verme salir nuevamente a citas.
Por desgracia, nada de esto ocurrirá. Porque estaba saliendo con un hombre.
Mi hermana me odiaba. Había perdido a otro miembro de mi familia. Si contaba la muerte de mi padre como una.
—¡Maddison, por favor espera! —bajé corriendo por las escaleras y me tropecé con el penúltimo escalón. Me levanté del suelo de inmediato sin darle importancia al dolor en mis rodillas. Mi hermana ya estaba cerca de la puerta y seguía sin decir nada y sin voltearme a ver.
Pasé junto a la cocina y me detuve cuando vi a Violet encima de la mesa, con su frazada sobre el hombro y un frasco de galletas a un lado. Levanté una ceja y antes de entrar, Josh llegó corriendo y chocó contra mi espalda al intentar frenar. Por el tiempo, tampoco había podido terminar de vestirse y solo se había colocado los pantalones.
—Yo la veo, ve con tu hermana. —contestó el teñido y asentí con la cabeza.
Reanudé mi camino y Maddy ya había abierto la puerta y tenía un pie fuera.
No veía su expresión, pero estaba casi seguro que seguía siendo la misma cuando abrió la habitación.
—Quédate... ¡te lo suplico! Entiendo que estés atónita, entiendo que quizás no querías enterarte de esta forma ni conocer mi verdadero yo. —hablé con un nudo en la garganta y mis ojos a punto de desbordar las lágrimas. —sigo siendo tu hermano, esto no lo cambia nada. Sigo siendo padre de una niña, también soy maestro de música. Si no quise hablarte de esto es porque siempre tuve miedo de cómo irías a reaccionar.
Hice una pausa y cubrí mi cara para soltarme a llorar todo lo que había estado aguantando. Lloraba como si Maddy hubiera muerto. Ni siquiera durante el funeral de mi padre reaccioné así.
Me cuestioné muchísimas cosas.
Tal vez Josh no debería estar a mi lado después de todo. No, no me merecía... merecía estar con alguien mejor, menos problemático, quien se ame a sí mismo. Quien su familia lo ame tal y cómo es.
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Blue neighborhood [joshler]
FanfictionLa homosexualidad no está permitida en este vecindario.