Blue neighborhood [joshler]

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Les debo otro cap esta semana por la espera 7u7

Visité aquella simpática librería un par de veces más después de mi descubrimiento. Entre semana, llegué a ir al menos tres de los siete días. No importaba si no iba a comprar algún libro niego. A veces, solo me aparecía para conocer las últimas novedades, hojear un par de libros antiguos y en oferta o, para simplemente platicar con el viejillo de la caja (que por cierto, resultó ser un señor muy amable y bondadoso). También me topé nuevamente con aquél pelirrojo con quien había chocado la primera vez. No habíamos platicado tanto como esa vez, a decir verdad. Solo intercambiamos un par de palabras y al final, el chico siempre tenía prisa y salía rápidamente de la librería con una pila de libros entre los brazos. Parece que se devoraba libro tras libro, pues nunca lo vi con alguna obra repetida. Todas eran nuevas y diferentes entre sí.

Yo también me había devorado el primer libro que había adquirido. Y el segundo también, y continué con el tercero. No eran historias muy largas, por lo cual, la lectura se me hizo muy fácil de leer y comprender. Sin darme cuenta, ya había acabado el libro y mi mente seguía con la necesidad de ser satisfecha una vez más con otro.

Josh había estado muy ocupado con su trabajo. Lo habían promovido y era una noticia muy buena, más orgulloso de él no podría sentirme. Aunque poco a poco nos quitó tiempo para pasarla juntos y mis ratos libres se hicieron cada vez más extensos. No me molestaba, es más, disfrutaba tener un tiempo para mí mismo. Pero seguía siendo raro, luego de haber pasado la mayor parte del tiempo juntos.

Además, me quedé a solas con su hija Alice un par de ocasiones. Acompañados de mi hija Violet, claro. Ambas habían comenzado a llevarse mejor y su relación pareció progresar de igual forma. Es muy lindo verlas convivir. Y debo admitir que toda esta situación me parece aún atemorizante porque Josh y yo nos habíamos estado acercando más con nuestras hijas en los últimos meses, y no me desagradaba, obviamente, pero me ponía a pensar sobre el futuro y sobre cuál sería el siguiente paso, así sea muy pronto como para pensarlo.

No quisiera que Josh me terminara viendo como a un niñero para su propia hija y no como un posible compañero para toda la vida.

Y entre mis tantas visitas a la librería, regresé en una mañana de sábado. Josh tuvo que ir a trabajar por las tantas responsabilidades que ahora tenía asignado y me quedé solo otra vez. Maddy cuidaba de Violet y Alice iba a pasar la mañana con su madre.

Entré por la misma puerta de siempre, de una madera algo gastada y obscura, y aspiré el dulce aroma a libros nuevos y viejos, mezclados con el olor a más madera y una esencia de manzana con canela. Saludé al viejillo y caminé felizmente hacia el área infantil, dispuesto a llevarle un libro a mi pequeña, para practicar su lectura. Estaba tan concentrado en mi búsqueda que un toquecito en mi hombro me hizo sobresaltar.

—Nos volvemos a encontrar. —dijo el chico pelirrojo de siempre y asentí sonriente con la mano sobre el pecho tras el susto.

—Y de nuevo te veo con libros eh. No sé cómo puedes leer tan rápido. —comenté y él negó.

—En realidad no me los leo todos. Hojeo varias páginas en búsqueda de respuestas e inspiración. —lo miré confundido y antes de intervenir, volvió a hablar. —por cierto, nunca pregunté por tu nombre.

—Dime Tyler. —pensé en tenderle una mano, pero con tantos libros encima lo vi imposible.

—Soy Ray. —y sonrió a continuación.

Ray se dio la vuelta y fue directo al mostrador, en donde el amable señor lo esperaba para pasar todos los libros y meterlos en una bolsa de tela color café claro. El pelirrojo la tomó y regresó a donde yo estaba.