Capítulo 9

1.9K 83 60
                                    

Megan

Normalmente no me molesta asistir a fiestas de celebridades o millonarios extravagantes, pero esta noche definitivamente no estaba de humor para sonreír, conversar y fingir que me estoy divirtiendo.

Si era honesta, preferiría estar haciendo cualquier otra cosa, pero tenía que resignarme a estar en el palacio Zabeel para cerciorarme de que los últimos detalles estuvieran en orden antes de irnos.

Además, sólo sería durante un par de horas.

Sin embargo, después de la discusión que tuve con Cristianno en el auto, por un momento pensé que tendría que continuar sola. Sabía que era una posibilidad, incluso consideraba que me lo merecía luego de cómo había resultado todo.

Estaba preparada para aceptarlo y continuar sin él.

Pero cuando se colocó a mi lado como si nada grave hubiera ocurrido, me sentí profundamente aliviada. Recorrimos la alfombra roja juntos, muy cerca el uno del otro con las manos entrelazadas. 

Una vez en el interior del edificio, buscamos a Dmitri entre el resto de los invitados

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Una vez en el interior del edificio, buscamos a Dmitri entre el resto de los invitados. No fue demasiado difícil encontrarlo, tal como imaginamos estaba en el bar probando todos los tragos de alcohol que existen en el mundo.

Me acerqué sigilosamente y apoyé una mano sobre su hombro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me acerqué sigilosamente y apoyé una mano sobre su hombro.

- Por favor, dime que no elegiste precisamente esta ocasión para emborracharte– Murmuré, apretando la mandíbula–

- No te preocupes, para que tenga efecto en mi cuerpo, necesito algo bastante más fuerte que esto– Afirmó, guiñándome un ojo–

- Tu respuesta no me convence– Objeté, mortalmente seria–

- Megan, no consumo drogas desde hace un año– Reiteró, determinado y cortante–

- Espero que no me estés mintiendo, porque te necesito concentrado y atento mientras estés trabajando en Dubái– Suspiré, mordiéndome el labio–

- Tranquila, confía en mí, ya aprendí la lección– Insistió, sonriendo ampliamente–

- ¿A qué te refieres?– Pregunté, frunciendo el ceño–

Ahora y siempre (ASP #3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora