Completamente Mío [OMEGAVERSE] [SATANIVLIS]

Epilogo

recomiendo reproducir la pista cuando salga la indicación, al final :)

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El blanco impoluto de su traje se reflejó en su rostro nívea. Era como ver a un muñeco de porcelana, con aquella corona de girasoles adornando la coronilla de su cabeza en contraste con el amplio velo que caía grácilmente por sus hombros estrechos. De alguna forma sus mejillas continuaban arremolinadas, tal vez se debía a que aún se sentía muy nervioso.

La boda entre Ivlis y Satanick se planeó a lo largo de un año, año en el que ambos habían concluido los estudios medio superior. Muy pronto ingresarían a la universidad, pero antes de ello querían concretar su matrimonio.

Siralos aceptó cuando Saranick pidió la mano de su hijo y los padres del alfa no se opusieron en lo absoluto, incluso Carol se ofreció en ayudar a Ivlis a encontrar un traje de novio lo suficientemente bueno para contrastar con su belleza, no es que ahora la relación de ambos hubiera mejorado, pero al menos se toleraban lo suficiente para sobrellevarse.

Cuando finalmente el día llego —en épocas de invierno—, casi todos los amigos de omega y alfa incluyendo a su família asistirían a la boda. Ivlis se comía las uñas de los nervios. ¿Quién fue el tonto que dijo que las bodas eran divertidas?

—Ivlis ya basta —llamo su atención Etihw mientras daba un pequeño manotazo sobre el dorso de la mano del omega para alejarla de su boca.

—Sí Ivlis, arruinaras tus uñas —secundo Igls a la par que arreglaba algunos detalles en el velo de su hermano.

—El tiempo paso muy rápido. No puedo creer que hoy sea el día —contesto Ivlis jugando con el pequeño ramo de girasoles entre sus manos.

—Sí, llego el día —respondió Igls—. Ahora mira aquí. —Llamo la rubia a su hermano, en cuanto Ivlis volteo de manera distraída el flash de una cámara le hizo pestañear—. Saliste muy bien.

De pronto alguien toco a la puerta.

— ¿Quién es? —preguntó Etihw.

—Ivlis, ¿está disponible? —preguntó una voz masculina al otro lado de la puerta.

— ¿Que paso, Kcalb? —respondió Etihw.

—Alguien vino a buscarlo, le dije que esperara en el jardín.

Etihw, Igls e Ivlis intercambiaron miradas confundidas. ¿Quién lo estaría buscando? Sin más el omega se levantó de su silla y caminó hacía la puerta.

—Ivlis no tardes mucho, la boda será dentro de poco tiempo. No queremos estar buscando a uno de los novios a última hora —comentó Igls con indignación.

—Descuida hermana, no tardaré.

Kcalb dirigió a Ivlis hacia el jardín donde le esperaba su visita, en cuanto llego a la entrada, permaneció en la puerta, dándole a entender al omega que le proporcionaría privacidad. Claro que aquel gesto fue muy raro y más viniendo de alguien como el alfa albino. Sin embargo, Ivlis decidió no prestar tanta atención.

En cuánto cruzo la puerta, el viento invernal agitó su velo frenéticamente de un lado a otro..., delante de él la figura alta del ser más amable que había conocido en toda su vida le esperaba, sosteniendo entre sus manos un inmenso ramo de girasoles. El corazón de Ivlis se agitó de forma presurosa mientras caminaba hacía...

—Justim —murmuró Ivlis.

— ¿Perdón?

No, no era la voz de Justim..., no se trataba de Justim. Sino de su mejor amigo y el cual pensó que no vería en un largo tiempo.