CAPÍTULO 18: pasta para tres.

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- Aitana, venga que vamos a llegar tarde.

-Dos minutos más, porfi Luis.- ella y su poder de embobarle con cada uno de sus movimientos, con cada una de sus notas o cada una de sus canciones y su cuerpo, que se ha acostumbrado a que ella sea quien decida los puntos y las comas de esa relación sin etiquetas,han echo que por culpa de esos "dos minutos mas" y un poco más de tiempo intentando encontrar su plancha del pelo, estén corriendo ahora por todo el aeropuerto para llegar de una vez al avión que los llevará a la capital. Porque solo hace falta que enrede su mano entre sus rizos y que acaricie su barba para que cuelgue la bandera y se proclame la reina.

-Me da miedo Luis.- dice cogiéndole de la mano intentando que así, se fuera su miedo a volar en avión, intentando que la mano del pelinegro la proteja de todo tipo de males.
El miedo le ha durado poco pues  con el madrugón que se han dado, les han bastado diez minutos para quedarse dormidos en el hombro del otro.

-Aiti...- le dice sacudiendo un poco su brazo para intentar que se espabile y que no se asuste al notar al avión tocar suelo. 

Solo consigue que la catalana se acomode más en su hombro y que tenga que recurrir a la última baza para lograr que se despierte; los besos.

-Estamos llegando ya.- le dice dándole un beso en la cabeza y posteriormente sus labios.

El avión se sacude ligeramente haciendo que Aitana, que se estaba estirando, se agarre muy fuerte al brazo más cercano, no puede evitarlo, pero es que al chico le parece tan adorable que sin quererlo se le escapa la risa a lo que Aitana le echa una mirada fulminante.

- Perdón, perdón.- se disculpa el gallego entre risas.

Media hora tardan desde que aterriza el avión hasta que salen de este.

- ¿Que te pasa.?- le pregunta al ver que se queda parada en medio del aeropuerto.

La chica le cuenta que desde hace varios días un pinchazo en la barriga la parte en dos y que ese síntoma es normal para más tarde achacarlo a los dolores
pre-menstruales que la sacuden una vez al mes.

Saca su móvil del bolsillo derecho dal pantalón mientras arrastra su maleta y barre con la vista todo el aeropuerto buscando a quien vendrá a recogerlos, Roi, concretamente que tenía una entrevista y de paso venía con Cris a un evento antes de empezar con el ajetreo de la promoción de su nuevo disco.

-Siga usted andando señorita Ocaña.- le dice cogiéndola por los hombros y dándole la vuelta para que vuelva a seguir andando.

- ¿Pretendes que vayamos a tu casa, en kayak.?- pregunta poniendo los brazos en jarra.- porque con la que está callemos, o vamos con Noé en el Arca o acampamos aquí mismo.

Es en ese preciso momento cuando se percata de la lluvia que cae insistentemente.

- Estoy en todo Aitana.- le contesta poniendo cara de superioridad.- que creías, ¿que no íbamos a tener un chofer particular ?.- le pregunta divertido al ver su cara de desconcierto. Su móvil vibra en el bolsillo y recibe la respuesta de Roi, que le indica que tardará algunos minutos más por la lluvia y el tráfico.

Le contesta a Roi y mientras apuran el tiempo se hacen un par de fotos con algunos fans que seguramente, den que hablar en las redes y justo cuando ve a Roi girando en la esquina avisa a Aitana  para que mire en su dirección. 

Le hacen señales al gallego menor para que les vea y entre señas consigue decirle que no se baje del coche para que no se moje.

- Súbete tu ya Aitana, que al final te vas a poner mala y siempre que te mojas por la lluvia te resfrías.- dice terminando de guardar las maletas en el maletero y le abre la puerta, ella todavía le mira con cara de ¿como sabes eso? y le apremia para que suba rápido al coche.

Soñemos juntos = AITEDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora