Creo en ti [Camren]

FINAL

–Camila, que bueno que pudiste venir.

Camila escuchó el saludo de su madre apenas llegó a la mesa para tres.
Después de la llamada que habían tenido al fin se había armado de valor para reunirse con sus padres, lo cual sonaba extraño, a cualquier persona le daba alegría quedar de verse con sus padres pero este no era el caso.

–Si, demoré un poco pero ya estoy aquí.–Dijo tomando el asiento que el mesero le indicó.–Doy gracias que Lauren encontrara un sitió para aparcar...

–No sabía que Lauren también vendría, solo hay mesa para tres.–Comentó Alejandro buscando a Lauren con la mirada.

–No, ella me está esperando fuera.

–Oh.–Dijo Sinu quedándose sin saber que decir.

–No era necesario Camila, tampoco es como si fuéramos a secuestrarte.–Comentó Alejandro alzando una ceja molesto. Sinu le tomó el brazo para que se calmara un poco y esté dejó escapar un bufido.

–¿De verdad me hicieron venir para esto? Porque si es así me voy.–Dijo Camila dispuesta a marcharse.

–No Camila, hija, espera.–Dijo Sinu.–Escúchanos al menos unos minutos.–Pidió y Camila volvió a tomar asiento.

Camila se quedó mirando a sus padres, quienes estaban frente a ella, Sinu al igual que siempre llena de joyas carísimas y Alejandro con aquel traje de oficina refinado.

–¿Y bien?–Habló Camila ya que ninguno de los dos se veía con intenciones de hacerlo.

–Camila, sabemos que no hemos sido los mejores padres últimamente.–Comenzó Alejandro.–Pero, todo tiene un por qué.–Camila rodó los ojos al escucharlo.

–Camila, lo que tu padre quiere decir es un enorme... lo siento.– Sinu habló interrumpiendo a su marido.–Sabemos que fuimos demasiado lejos y que probablemente ahora mismo nos odies, pero la verdad es que lo hicimos porque creíamos que era lo mejor.

–¿Lo mejor?–Dijo Camila molesta.–¿Lo mejor es alejarme de la persona que amo con chantajes?–Sinu asintió escuchando los reproches de su hija, se lo merecían, ahora lo sabía.–¿Lo mejor es traer a Austin para que me engañe de nuevo?

–Camila, baja el tono, estamos en un lugar público.–Dijo Alejandro hablando entre dientes.

–Eso es lo que te preocupa padre, eso es justamente lo que siempre les a preocupado.–Dijo Camila mirando a ambos con rencor.–Lo que los demás digan, guardar las apariencias, cuando lo que les debió de haber preocupado fui yo...–Terminó de hablar quebrándosele un poco la voz.

–Camila....–Sinu le dijo a su hija viéndola con tristeza.–Perdónanos por favor.–Tomó la mano de Camila por sobre la mesa.–Ahora lo sabemos, y estamos arrepentidos.–Camila la miró tratando de descubrir si lo decía de verdad.

–Fuimos egoístas, ¿está bien?–Hablo Alejandro.–¿Eso es lo que quieres escuchar? Pero ahora también somos lo suficientemente capaces de pedirte disculpas.

Camila miró a su padre, parecía sincero pero ese rencor que tenía no la dejaba creer del todo.

–Tienes que entender que para nosotros también fue difícil procesar que ahora tienes una  hija y que también tienes una novia.–Comentó Sinu tomando la atención de Camila.

–Exacto, además tienes que entender que tú tampoco estás libre de culpas, el irte así, mintiéndonos....–Dijo Alejandro negando.–Tampoco fue la mejor de las decisiones. ¿Tienes idea de cuánto te buscamos?–Camila abrió los ojos como platos negando.– Contratamos a un investigador privado, con su ayuda dimos contigo.