Egoísta

Retrocesos Parte 10

''Los retrocesos también producen muchos pensamientos obsesivos que entrampan a la mente en una especie de eco, de repetición de patrones de pensamiento''

Hynata Hyuga había cambiado, todo eso se lo debía a Naruto Uzumaki, el sol que ilumino su vida sin saberlo, el que había logrado que cambiara su forma de ser, ya no era la misma Hynata, ahora era honesta, libre, fuerte, desafiando a su padre cada que ella no estaba de acuerdo con los sellos, todo eso se lo debía al rubio.

Acostada en su cama, rememoro su infancia, el cómo conoció a su sol, el como este lo defendió e hizo que ella terminara enamorada de aquel niño, su príncipe.

Por el ahora era un a Hynata diferente, una líder segura, apreciada por su primo y hermana, por su clan que habían notado como había cambiado, desafiando a su padre, quien ahora estaba más orgulloso de su primogénita, a pesar de que esta lo desafiaría, marcándole sus errores.

Nadie sabia que todo eso se debía al chico Uzumaki, solo ella, pero a pesar de haber cambiado, todo se iba al carajo cuando ella lo veía, sintiéndose avergonzada, aun no tenia el valor de hablarle; su alegría fue demasiado al ver que había regresado después de 3 años, lo había reconocido de inmediato; quiso acercarse, pero por mas que lo intento se avergonzaba, esperaría hasta la fiesta, había ayudado a Ino en todo, ahora eran amigas.

Su sorpresa fue extrema al verlo como mujer, pero eso no evito seguir sintiendo lo que sentía por Naruto Uzumaki, extrañamente el que tuviese esa apariencia logro hacer lo que jamás hacia cuando el era chico, se acercó, lo saludo, hablo con el y concertó salir a comprar con ella; por eso en ese momento rodaba de felicidad extrema en su cama.

Suspiro feliz, esperando con ansias el día siguiente, bueno primero ayudaría a su amiga Ino a limpiar su casa, ya que por todo lo que había sucedido desde lo de Akamaru, la fiesta termino durando poco; el recordar a la rubia solo hizo que se sonrojara, terminando masturbándose, ya no ahora con un rubio, sino con la versión femenina de este, después de su orgasmo, sucumbió a los brazos de Morfeo.