Confesiones vergonzosas de unas cuantas mentiras piadosas

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Afuera iban caminando tomados de la mano aun, el Akimichi y Naruto, Ino solo sonreía al ver más confiado a su compañero de equipo.

-Deberías ir a visitar a tus padres Choji -expreso Ino amablemente.

-Opino lo mismo, es preferible que sepan de nuestras bocas, antes de que escuchen los chismes de Kiba y Haruno -dijo el oji azul.

-Tienen razón, iré ahorita mismo, pero primero, les dejare en sus casas -comento Choji serio.

-Oh, no te preocupes por mí, iré a buscar a las chicas -contestó Ino. -Yo aquí me separo de ustedes, hasta mañana -comento un poco preocupada por su compañero de equipo.

-Hasta mañana/Hasta mañana Ino -hablaron dos voces al mismo tiempo.

-Yo iré contigo Choji -dijo el rubio serio.

-De acuerdo -comento amable el Akimichi, así siguieron caminando agarrados de la mano, notando como algunas personas los veían y otras tanto hablaban en susurros o en voz alta.

-Lo siento Choji -comento un poco avergonzado Naruto, sintiendo la necesidad de soltar la mano del peli naranja, lo que menos deseaba es que le dañaran con palabras o en su defecto lo maltrataran por su culpa.

-No es tu culpa Naruto, así que no te pongas triste -agrego, mirando el rostro del mencionado, quien se sorprendió que notase como se sentía, siguieron caminando en silencio hasta que llegaron al complejo Akimichi, Choji toco la puerta y su madre fue quien le abrió, cuando esta vio aquellas manos unidas abrió sus ojos, para luego ver a su hijo más delgado y a Naruto, ambos jóvenes estaban a la expectativa de la reacción de la mujer.

-Pasen -fue lo único que dijo al ver a gente chismosa afuera, ambos entraron sin notar su alrededor, cuando ya estuvieron dentro de la casa, observaron al padre de Choji, quien los veía a los dos serios. -Siéntense chicos -dijo la mujer, para ponerse a lado de su esposo, Naruto se sentía preocupado por lo que fuesen a decirle a su amigo, así que sin dudarlo iba a decir la verdad, hasta que el peli naranja se le adelanto a hablar.

-Quiero estar con Naruto, no importa si ustedes no están de acuerdo, o toda la aldea, no lo dejare -expreso aquellas palabras sin vacilación alguna, sin observar el rostro sonrojado del mencionado, quien bajo su mirada, sintiendo su corazón latir.

-Te lo dije mujer -comento su padre sonriendo, él había visto como su hijo se había interesado en el rubio desde que eran pequeños, hasta que dejo de hacerlo.

-Choji debiste decirme, ese día que vinieron por sus cosas, lo siento Naruto, por todo lo que dije, sin saber que ya estaban saliendo, ¿tiene tiempo?, ¿fue desde antes que te fueras con Jiraiya? -pregunto la mujer curiosa, sonriéndoles, el rubio estaba en extremo rojo, sin saber cómo expresar la mentira en la que arrastraba a su amigo.

-Fue hace poco -comento Choji. -Yo lo siento -agrego calmado.

-¿Sentirlo?, ¿porque hijo? -pregunto su padre.

-Porque me gustan los chicos -respondió el Akimichi.

-Eso no importa, sea lo que sea que te guste, chicos, chicas, yo quiero nietos Choji, no ahorita, ya tendrán tiempo para ver cómo me los dan -dijo emocionada su madre.

-¡Mamá! -exclamo el peli naranja avergonzado.

-Si, snif... -respondió el Uzumaki llorando, aquel comentario le había hecho sentir aceptado por gente que estaba fuera de su entorno.

-Cariño no llores -comento la mujer acercándose al rubio para abrazarle, apartando a su hijo, quien no sabía qué hacer en aquella situación.

-Gracias, muchas gracias -respondió Naruto, limpiando su rostro.

EgoístaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora