Capítulo 20

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MELANY

Todos sacaron las armas menos yo, que no la había traído.

–Hey, tranquilos fieras. Vengo sólo a hablar con mi amiga.–dijo Jenny sonriéndome.

–Lárgate, Jenny.–dijo Karol poniéndose delante de mí.

–¿Me vas a obligar?–preguntó desafiante.

–Chicos, tranquilos, está bien.–dije bajando el arma de Karol. Me acerqué a ella y la miré fijamente.–¿Qué quieres, Jenny?

–Bueno, me ha dicho un pajarito que eres muy buena con la espada.–todos los que pasaban por ahí se quedaron observando la situación.

–¿Qué pasa con eso?–pregunté y se acercó a mí.

–Verás, yo no me creo algo hasta que lo veo, así que me gustaría comprobar que es cierto. Te propongo un duelo.–Abby se acercó a ella.

–¡Pírate Jenny...!–se acercó demasiado y tres de su grupo se pusieron delante de ella desafiándola. Puse mi mano en el hombro de Abby y le indiqué con la mirada que no pasaba nada. Me miró fijamente y se alejó. Jenny volvió a dirigirse a mí.

–No quiero luchar contra ti. Vámonos.–me di media vuelta.

–Siempre fuiste una miedosa. Por eso nunca le confesaste a Kevin tus sentimientos.–dijo Jenny deteniendo mi paso.

–¡¿Cómo coño sabes tú eso?!–le pregunté sorprendida.

–La próxima vez que hables de tus temas personales con tus amigas, procura que no haya nadie en los baños escuchando.

Mierda.

–Lo que yo haga con mi vida no es asunto tuyo.–le dije intentando mantener la compostura.

–Qué vida más triste tienes...–empezó a dar vueltas a mi alrededor.–Intentas proteger a tus amigos y al final acabas perdiéndolos a todos.

–Cállate.

–Kevin te quería muchísimo, se veía desde lejos y tú nunca te dabas cuenta.

–¡Cállate!

–Podrías haberle dado la felicidad que se merecía. Pero claro, siempre llegas tarde a todo.–se acercó a mi oreja– Y ahora tu amiguito está muerto.

Levanté el puño a punto de darle una paliza pero me detuvo agarrándome del brazo.

–Eh, eh, tranquila... Vaya, nunca cambiarás. Siempre odiaste escuchar la verdad.–se me pusieron los ojos cristalinos y me solté de ella.

–Vete a la mierda.–le dije llena odio.

–Bueno, entiendo que no quieras luchar contra mí. Está claro que tienes miedo, tranquila, ya estoy acostumbrada a que me temas.–observé que la pulsera que ella llevaba en el brazo tenía otra de oro con las letras brillantes diciendo "LÍDER". ¿Qué demonios era eso de ser un líder? Incluso Zack tenía otra pulsera igual.

Jenny se dio media vuelta y empezó a caminar.

–Espera.–la detuve y se giró hacia mí. –Acepto el duelo.–Jenny sonrió y Alex me gritó si estaba loca.

Quería callarle la boca, quitarle esa asquerosa sonrisa de la cara y que dejara de tomarme como débil. La odiaba con toda mi alma. Ella me había dado los peores años de mi vida y era hora de vengarme.

No estaba pensando, sólo me dejaba llevar por el odio.

–Buena elección. ¿Tienes tu arma aquí?

Imborrable Donde viven las historias. Descúbrelo ahora