ALEX
El timbre anunciaba la salida, todos mis compañeros cogían sus mochilas y se marchaban, yo aún estaba guardando algunas cosas dentro de la mía. Karol y mis nuevos amigos me estaban esperando en la entrada para marcharnos.
Soy un chico al que le gusta conocer nueva gente, pero cuando veo que no quieren relacionarse prefiero no molestarlos. Eso me ocurrió con Melany, una chica que me pareció ser una persona callada, reservada, no muy sociable y un poco seria. Yo siempre le hablaba con respeto, como ella a mí. Me sorprendió que con algunas personas se comportara de forma desagradable, y en cambio, con Karol y conmigo era diferente, y nunca pensé que llegaría a ser su amigo. Kevin me pareció un chico gracioso, simpático y sociable. A Carla la conocía de vista pero me pareció una persona amable y dulce.
Mientras guardaba unos libros en la mochila empecé a pensar en Sofía, no se por qué no se me sacaba de la cabeza desde que pasó aquello. Algo me decía que la conocía de algo. Había oído mucho hablar de ella, de que Jenny siempre la molestaba, que nunca estaba con nadie, y que era muy callada. Nunca ella y yo nos cruzamos, ni nos hablábamos, pero cuando la había visto de cerca, me había sentido muy extraño.
Jenny me parecía una chica estúpida, malcriada, egoísta y estaba harto de ella que no pude evitar hacerle frente.
Aparte de su inmadurez, lo que también me sorprendió fue cómo se dirigió hacia Melany y le hizo frente con gran confianza. Y Melany, que la miro con mala cara y no decía nada. Yo me habría levantado y le habría pegado dos hostias.Cuando me giré hacia Sofía la observé más de cerca, vi sus lindos ojos verdes cristalinos debido a las lágrimas que estaba intentando no soltar, sus pecas en su pequeña nariz y sus mejillas sonrojadas.
No me esperaba que se fuera de esa forma. Pero al verla correr sentí algo que aún no sé explicar.
Cogí la mochila y salí de mi clase, que estaba completamente vacía. Al igual que los pasillos, caminé tranquilamente hasta llegar a las escaleras. Una voz que no conocía detuvo mi paso.
--Perdona... ¿Tienes un momento?--me giré y la vi, a la chica que no se me sacaba de la cabeza, ahí estaba, Sofía, con sus dos coletas que se posaban en sus hombros, su camisa de tiras verde que hacía conjunto con sus ojos, su pantalón vaquero, sus playeras y su mochila roja con estampado de flores. Me quedé en silencio mirándola fijamente--.Esto... ¡Perdón por las molestias!--posó sus manos en mi pecho dejando una carta que por el impulso la agarré con las mías, después se fue corriendo de nuevo. Observé como iba desapareciendo de mi campo de visión y luego miré lo que tenía en las manos. La carta era un folio doblado que ponía "Para Alex" con una letra preciosa. La desdoble hasta intentar leer lo que ponía...
--¡Alex!--me sobresalté y puse la carta en mi espalda. Karol estaba al final de las escaleras observándome con el ceño fruncido--.¿Nos vamos o qué?
--Sí, sí, ya voy.--Karol se fue y guardé la carta en mi mochila.
Llegué a mi casa y fui a mi cuarto, tenía mucha curiosidad por saber que ponía en la carta. La saqué y me acosté en mi cama.
Antes de abrirla me quedé un rato en silencio. ¿Por qué me ponía tan nervioso con esa chica? Desde que me miró a los ojos no pude dejar de pensar en ella, a pesar de que me molestó que se fuera sin decir nada. ¿Cómo podía estar así con una chica que no conocía de nada?
Esto es estúpido. Me levanté y dejé la carta en mi escritorio. Le había dicho a mi tío que no iba a comer cuando en realidad tenía un hambre increíble. Todo por una carta de una chica malagradecida. Suspiré y abrí la ventana para coger aire fresco. Un viento fuerte entró y tiró la carta al suelo haciendo que se desdoblara. Rápidamente la recogí y observé cómo unas letras bien escritas formaban una simple palabra que hizo que mi corazón diera un vuelco y mis mejillas se empezaban a sonrojar retirando todo lo que había pensado antes.
Unas simples letras, una simple palabra escrita en una simple carta.
"Gracias".
ESTÁS LEYENDO
Imborrable
De TodoYo sólo observaba sus acciones, pero nunca les tomaba importancia. Esas personas dejaron de verse, pero nunca me preocupé. Mi mejor amigo por el que descubrí tener sentimientos hacia él, desapareció sin dejar rastro, nadie se acordaba de él, no habí...