El caliente de su sangre arropó su garganta reseca como las estrellas lo hacían en el manto de la noche. Hongbin gimió por el placer de simplemente alimentarse y empujó entre las piernas de ella mientras bebía, haciéndola gemir fuertemente. Las uñas de ella se anclaron en su espalda con fuerza y con desespero intentaba llevarlo más profundo. Él metió las manos por debajo de la falda de la mujer, agarrando su culo con fuerza, moviéndola de arriba abajo aceleradamente.
Gabriella sabía lo que necesitaba e iba a matar al vampiro si no se lo daba ya. Como súcubo, ella no podía experimentar el mayor placer hasta que él no se corriera dentro de ella. Hongbin lo sabía y estaba aguantándose, haciéndola perder la cabeza. Escuchaba el murmullo de la gente que pasaba y los veía, normalmente le gustaba que la gente mirara lo que hacía, pero en estos momentos estaban siendo tan ruidosos en su asombro que le era molesto... Ah, pero estaban excitados, Gabriella podía olerlo en el aire. Mas eso no era importante ahora. Miró al vampiro a los ojos y uso su poder, él se resistió con una risa y trató de cambiarla de posición, pero ella se alzó y se sentó con fuerza, llevándolo tan adentro que Hongbin se perdió en la idea. Sus poderes estaban destinados a que el vampiro pudiera sentir todo lo que experimentara con más intensidad. Por eso, en cuestión de minutos, él se corrió dentro de ella, con gemidos tan roncamente sexys que la hizo venirse tan fuerte que sus gritos llenaron la noche y su poder aumento perfectamente en su interior.
El vampiro pudo ver el cambio de la súcubo una vez alimentada, pues ella parecía brillar. Gabriella movió su cabello negro a lo largo de su espalda, acomodando el corsé que el vampiro no destruyó por puro milagro, pero no se movió un centímetro de encima de Hongbin. Las mujeres que pasaban hacían un escándalo al verla, cuchicheando que ella era una puta... por otro lado, los hombres también pensaban que ella lo era, sólo que sus sentimientos eran todo lo contrario. Mientras las mujeres odiaban el hecho, los hombres querían ser Hongbin. Aunque cuando las mujeres comenzaron a notar al vampiro, la historia comenzó a cambiar.
-Bueno, bueno -Dijo Gabriella, poniéndose de pie, dándole tiempo a que Hongbin se acomodara los pantalones... quien se tomó todo el tiempo del universo-. Ya vieron la porno gratis, ahora pueden marcharse. Gracias por visita -Hongbin estalló a carcajadas, mirando a las personas irse ofendidas.
Hongbin barrió el parque con la mirada, en busca de peligro por puro habito. Ahora que estaba bien alimentado, podía pensar con claridad lo que había venido a hacer en primera instancia. Mientras sus hermanos buscaban pistas, él buscaba aliados y estaba cobrando cada favor que le debían esta vez. Su creador no iba a volver a joderles la vida sin una buena pelea. La última vez ellos tuvieron una bendita suerte que aún lo dejaba impresionado. Los dioses estuvieron de su lado esta vez... no había otra explicación al asunto. Era por eso que estaba aquí con la súcubo. Ella, además de ser condenadamente buena en la cama, conocía a muchas criaturas. Gabriella le ayudaría a encontrar otros aliados a cambio de una deuda que deberá pagar cuando ella quisiera.
-Dijiste que conocías criaturas que pueden ayudarnos -Hongbin no sabía porque esta vez decidió creerle, teniendo en cuenta de que la criatura le ha mentido más veces de las que puede contar.
-Lo hago. Estamos esperando por... -Lo que iba a decir quedó interrumpido por el sonido de un cuchillo que había sido lanzado a una velocidad considerable. La súcubo movió ligeramente la cabeza a un lado y atrapó la daga que evidentemente estaba destinada a herirla, lo que hizo que el vampiro recordara que él no hablaba con una flor delicada. Gabriella podía tratar de arrancarle la cabeza en un parpadeo si él se descuidaba.
La súcubo siseó mostrándole los dientes al recién llegado, pareciendo un gato enojado. Sus brillantes ojos verdes se mostraron fríos, dejando en el olvido el toque juguetón que tenían hace minutos. Entonces, con el mismo movimiento que usó para agarrar la daga, la lanzó haciendo que se escuchara un quejido a la distancia que la hizo gorgorear de alegría.

ESTÁS LEYENDO
Los Reyes de la Noche
FanfictionEspecial de Halloween de Vixx. No te preocupes! Nada de miedo! *** Creative Commons License Los Reyes de la Noche by NMLexie is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 International License. Based on a work at h...