Por un largo rato había tenido que ser contenida, ya que el llanto no quería detenerse, también los recuerdos golpeaban mi mente y no me dejaba hablar el gran nudo en mi garganta; se necesitaba desahogar con lágrimas que caían insistentes y por sí solas, mientras mi cuerpo temblaba. Conejo tras advertirlo, se encargó de abrazarme y hacer todo lo posible por reconfortarme: Primero me compartió un chocolate de receta especial, el efecto que daba ayudaba a conseguir la sensación de calma. Luego Tooth llego para unírsele, tras ser notificada por Norte de mi estado; pensando que sería una buena decisión, que también estuviera para mí. Al entrar en la habitación, me había traído una taza de Té dulce, relajante y especial; que Ombric al entregárselo indicó que me ayudaría. Los tenía sentados a cada lado llenándome de atenciones y animándome: Conejo, como una figura protectora, me abrazaba por el hombro permitiendo que me recargase en él. Tooth me acariciaba, con su delicada calidez, sosteniendo mi mano. Todo eso ayudaba, lentamente y con el correr de los minutos, a ir desapareciendo la angustia.
-Sé que es mucho pedir. Pero esa mirada de lastima, solo me hace sentir peor. –Susurre con más tranquilidad tras respirar profundamente, sintiendo los efectos secundarios del llanto, al tener la voz temblorosa aun.
-Lo sentimos –Comentó Hada con la otra mano en el pecho, haciendo el intento fallido de darme una sonrisa genuina.
-¿Estas mejor? –Preguntó Conejo hablando bajo al estar cerca, se separó un poco para verme y recibir un asentimiento. Dejando caer sus orejas hacia atrás y volviéndolas a levantar rápidamente, decidió preguntar- ¿Qué es lo que sucedió?
-Ahora me es difícil de explicar y la verdad solamente lloraría otra vez ¿Podrían esperar un poco para escuchar esa parte? –Pregunté tras beber el último sorbo de mi taza. Conejo volvió a abrazarme como antes, después de entregarle a Tooth la taza para que la colocara en la mesa. Se encargó volando, con la misma rapidez que hablaba, atropelladamente. Luego los mire siendo mi turno de preguntar- ¿Cómo esta Jack?
-Despertaron los dos a la misma vez. –Contesto Tooth con una media sonrisa pero nerviosismo en la voz.
-Déjame reformular ¿En qué estado despertó?- Volví a preguntar con insistencia, cuando noté su evidente evasión.
-Norte llego inmediatamente avisándome de como estabas, lo poco que pude ver es que despertó bien. –Miró a Conejo en búsqueda de ayuda, él solo pudo negar alzando sus hombros levemente, no tenía idea de cómo estaba ya que no se movió de mi lado ni para hablar con los guardianes.
-Creo que Norte te lo podrá contar pequeña, estuvo pendiente de ambos en todo momento. –Hablo con intención de animarme y asentí cuando volvió a acurrucarme en sus brazos.
-¿Sus heridas al menos? –Pregunte a Tooth, logrando que cambiara el semblante, de nerviosismo, a una de alivio por ser algo que podía responder.
-Ombric y Katherine se encargaron, no eran tan graves como parecían. Solo algunos cortes superficiales y moretones. –Respondió velozmente, pero viendo como sus plumas vibraron al hablar y su cresta se alzó.
-Si ella hubiera querido, pudo hacerle verdadero daño. Él estaba a su completa merced. –Continuó Conejo mirándome con curiosidad.
-El físico no fue el verdadero. Pero quisiera saber cuánto daño sentimental y psicológico le infligió. –Respondí de una manera fría Y con un deje de tristeza reflejada en mi mirada- Me hago una idea por lo obsesionada que Ella está con Jack. En la cueva, sostenía que ella lo amaba más, que lo quería a cualquier precio y que yo no lo merecía; aun si eso significaba que él muriera en sus manos, para que yo no lo tuviera a mi lado. También me dijo, que era lo estaba haciéndole ver en las pesadillas que le causaba.
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Moonchild (Jack Frost x Elizabeth)
FanfictionElizabeth una muchacha de 17 años se enfrenta a una repentina mudanza dejando atrás una vida que nada le prometía, por una que crea nuevas oportunidades para ella y su familia. Pero si se lo dijeran jamas lo creería, las cosas que viviría por ello...