Moonchild (Jack Frost x Elizabeth)

~Cap 7: "Los guardianes"

Aquella luz se sentía tan familia, mire mi mano unos segundos escuchando que Jack intentaba llamar mi atención diciendo mi nombre pero lentamente todo se volvió obscuro y hasta mi mano se desvaneció en aquella bruma obscura. Había perdido el conocimiento rápidamente dejando caer mi cabeza hacia atrás y mi mano a un lado de mi cuerpo.

Jack

-¡Elizabeth! -la llame varias veces para intentar que respondiera viendo como su conciencia desapareció frente a mis ojos, me acerque para auxiliarla tan rápido como pude tomando sus manos recostándola pensé que hacer en esos momentos. Primero me asegure de que respirara acercándome a su rostro sintiendo su respiración tranquila parecía dormir pero si comenzó a levantar fiebre. El calor de su piel estaba algo elevada coloque mi mano en frente para cerciorarme, me levante de su lado decidiendo llevármela hacia el polo, después de todo aquí no podía hacer mucho y allí sabrían más que hacer, necesitaba inmediatamente decirle sobre la extraña luz a norte.

Decidido la tome en brazos cubriéndola bien con su ropa cerrando su campera y afirmando su bufanda inicie el vuelo llevado por el viento aquella gran distancia hasta el taller, al llegar rápidamente entre abriéndome por la puerta principal dejando que los Yetis la cerraran asustados por el golpe repentino.

-¡Llamen a Norte, rápido! -Grite continuando mi vuelo hasta la sala del gran globo aun cargándola en brazos, aparecieron algunos de los pequeños elfos y Phil mirando a la muchacha en mis brazos preocupado - ¡Phil donde esta norte necesita ayuda ya! -Me señalo la oficina del Ruso de la cual ya salía entre quejas y jalones de los elfos, antes de que llegara me acerque volando enseñándole a la muchacha en brazos rogaba por que le ayudara intentando explicarle también lo que sucedió sin mucho éxito.

-¡¿Jack quien es ella y porque demonios la trajiste al polo norte!?

-Se desvaneció de repente y no supe que hacer por eso la traje aquí, primero estábamos jugando en la nieve y vimos la arena de Sandy, la rete a tocarla y cuando lo hizo rápidamente me cegué por completo... -intentaba explicar a la misma velocidad que hablaba Tooth o más aun sin tomar aire ni pausas entre palabras solo que no sabía que hacer hasta que norte me tomo de los hombros calmándome.

-Las explicaciones para luego, ahora recuéstala en una de las habitaciones para dejarla descansar. -Comenzó a caminar en dirección de las habitaciones y me permitió el paso para que descansara en una de las camas, le quite sus abrigos y la cubrí con una de las mantas. Así estaría bien por ahora, su rostro tenía un color rojo en las mejillas por la temperatura de su cuerpo pero bajaría con algo de descanso y cuidados. Salí con norte dándole una última mirada de suma preocupación dejándola bajo el cuidado especial de los elfos y Phil. Nos dirigimos a la oficina para discutir lo que había sucedido cerrando la puerta detrás de nosotros teniendo más privacidad.

-No entiendo muy bien que sucedió allí, pero paso y fue algo extraño -lo mire fijamente a los ojos, el cruzo sus dedos frente a su rostro sentado ya en su escritorio, comencé por disculparme - Lamento traerla aquí, estaba un poco desesperado respecto a lo que debería hacer y la traje aquí donde pudieran ayudarla rápidamente.

-Comprendo Jack no te disculpes por eso, solo debe descansar, solo cuéntame todo tranquilamente. ¿Galleta?-comento con una voz tranquila mientras me invitaba a sentarme y me tendía el plato con galletas recién hechas, moví mi cabeza negando para rechazarle sentándome frente a él con el cayado a un lado.

-Estábamos deslizándonos en una de las colinas con nieve en la noche y la mientras la arena de Sandy comenzaba a aparecer por los cielos metiéndose en la casa de los niños. Ella logro verla y nos acercamos para poder hacerlo más de cerca cargándola en brazos, ahí fue cuando comenzó cuando la rete a tocarla. Usualmente al rozarla salen figuras de algún sueño, pero en ese momento cuando ella lo toco además de eso, ¡salió una poderosa luz que me cegó completamente!, no podía ver nada frente a mí ni nada, solo aquella luz blanca. -Intentaba explicarme con las manos y el solo asentía procesando aquello que le contaba, el bebía su chocolate a medio terminar de antes meditando algunos segundos -Entonces, ¿no crees que debemos investigarlo?