More Than A Travel (Nash Grier)

Veintiuno.

—En serio yo no sé cómo soportas a este tío, me da miedo  hasta a mi —le digo a Samantha mientras prendemos rumbo -por fín, ya que Anthonny se quedó un buen rato hablando con Sammy delante de mí- a nuestro apartamento.

—¡Pero si te he dicho que no lo soporto! Además has sido tú quien prácticamente le ha llamado a gritos para que viniese —se queja Sammy.

—Bueno bueno eh —alzo las manos inocente y llegamos a casa.

—Voy a llamar a mi madre que debe estar impaciente por la llamada —dice cuando pisa la moqueta tirando sus dos bolsas.

Yo ya había llamado hace muy poco a mi madre asíque la tenía todo actualizada de mis momentos aquí en Nueva York. Ahora que lo pienso, no sé cuándo volveré para visitarles. Es obvio que no me voy a quedar aquí para toda la vida y no ver ni a mis padres ni a mi hermano nunca más, aunque eso es lo que pasó con mi hermano mayor, básicamente, aunque aún siguiéramos hablando por skype hasta que me fui de casa.

—Ya está, de verdad, todo el día preguntando si estoy bien —dice rodando los ojos Samantha y yo me echo a reír—. Estoy deseando estrenar el vestido.

—Yo tambien, ahora que hablamos de la fiesta, ¿a qué hora es? Si es que no tenemos idea de nada, no conocemos al tal Eddy —digo con mis dudas.

—Obviamente en las fiestas universitarias nunca se conoce a casi nadie y a veces mucho menos a los dueños de las casas en las que se organizan —dice la sabelotodo.

—Le preguntaré a Adrián.

Encendí mi móvil que había estado todo el día apagado, puesto que hoy era día de compras y lo pensaba emplear bien, no cogiendo wifi del centro comercial para hablar y hacer las tonterías que hago con él. Tengo un mensaje de Adri y lo leo emocionada.

<<Te extraño, he venido a tu casa pero no estabas>> -Adri.

Creí haberle dicho que hoy me iba de compras, pero si se me olvidó no creo que sea un gran detalle.

<<Y yo a ti <3 ¿A qué hora es mañana la fiesta?>> -Ash.

<<Podemos ir a partir de las nueve de la noche>> -Adri.

<<¿Tan pronto?>> -Ash.

Estaba un poco sorprendida, claramente yo supongo que esta fiesta será algo con glamour, aunque cuanto más tiempo estuviésemos allí mejor,

<<A la hora que tú quieras, princesa>> -Adri.

La verdad esque a cualquier chica que le hubiera dicho esto Adrián, con lo apuesto que es, se habría sonrojado y/o tirado ya por la ventana del rubor, pero yo no, yo eso lo haría por Nash.

—Samantha, a las nueve nos recoje Adrián —le informo.

—Ah, ¿que nos va a llevar tu novio? —pregunta incorporándose en el sofá.

—¿Con quién pensabas ir?

—¿Con las chicas? —pregunta, y tendría que ser una afirmación, pero como es tonta, se lo perdonamos.

—Viven en la otra punta, no van a venir a recogerte explícitamente, es o con Adri o andando.

—Nada de morreos delante mía —me advierte.

—Vale, vale.

La tarde-noche se nos pasa completamente rápido y cuando nos quisimos dar cuenta ya eran las doce de la noche y nos estábamos acostando. Una vez más, y sin querer, me acosté pensando en Nash. Me siento estúpida, puesto que se ve que él está contento con su novia obsesiva y yo tengo que hacer que estoy contenta con el mío. Y es verdad, yo estoy contenta con Adrián, es muy bueno conmigo y me respeta bastante pero por alguna razón, no me llega a gustar tanto como lo hace Nash. Él tiene su cosa especial.