Se acerca tanto que puedo sentir su cálido aliento pero de repente me da un escalofrío provocando que un estornudo lo joda todo. Él se ríe y nada a por la tabla para volver a traérmela. Genial. ¿Qué habría pasado si no me hubiera dado un espasmo por el frío? Tengo ganas de aprender a surfear más pero... si me caigo más veces más durarán las clases... Sí, desde luego soy perversa.
—Hay muchas más olas, ¿quieres seguir o lo dejamos para otro momento? —me pregunta sosteniendo la tabla para que me subiese.
—Yo nunca me rindo —sonrío de mediolado y me subo de un impulso hábil ya que Nash estaba sujetando la tabla, sino me habría caido como anteriormente.
—Está bien —sonríe—, pero sobre todo, paciencia.
Sí, muchísima...
—A ver, ésta es mía —sonrío haciéndome la profesional, eso es lo que dicen todos los expertos ¿no?.
Cuando viene me levanto apoyando mis rodillas y caigo al agua antes de siquiera venir la ola. Oigo las risas de Nash y no sé ni siquiera dónde está. Esto me cansa por momentos, ya dije que no tengo paciencia y me fastidia no saber hacer esto, siempre me enfadaba de pequeña cuando no ganaba en algún juego y esto no es la excepción.
—Te dije que no te arrodillaras, así pierdes el equilibrio —dijo mientras nadaba.
—Pues, a ver, maestro, hágalo usted.
—¿Me estás retando? —alza una ceja.
Asiento varias veces la cabeza divertida y observo cómo se tumba en la tabla en la que he estado yo antes. Nada más al fondo supongo que para no tener que esperar tanto a la ola y se sube -sin apoyar las rodillas, grave error, Ashley- y parece que patina y se desliza por la parte superficial del agua. Me siento privilegiada por ver esto porque en verdad se ve tan mono que no puedo imaginarme a ninguna otra persona haciendo esto. Sonríe mientras surfea y sé que le gusta esto y que disfruta. Y ahí es cuando me doy cuenta.
Sarah no se lo merece.
Me vuelvo a culpar a mí misma por habérsela presentado. Esque en realidad es mi culpa. Ella lo trata mal y él simplemente lo olvida, hace de tripas corazón y sigue a pesar de que ella le haga daño.
—¿Estás bien? —me pregunta una vez al lado mío.
—Sí... surfeas muy bien, Nash —digo sinceramente.
—Sabía que perderías este reto, perdedora —me sonríe haciéndome cosquillas bajo el agua casi ahogándome. Me río tanto que sí, me estoy ahogando. Él me coge rápidamente cuando no siente ejercer mi poca fuerza para liberarme de sus cosquillas—. Eres muy débil —dice ahora sí riendo. Le doy un golpecito en el hombro y nadamos hacia la orilla, donde estaban todos jugando a las cartas, incluidos Matt y Cam, aun mojados porque supongo que también habían estado surfeando.
—¿Qué? ¿Ya has aprendido? —me pregunta Belén.
—Yo creo que no —dice el gracioso de Nash riéndose.
—Ya aprenderé, se necesita paciencia —digo imitando a Nash.
—Yo también quiero aprender, amor —dice Sarah corriendo hacia Nash. ¿En serio? Ahora tampoco tiene personalidad. Yo la mato.
—Emm —se rasca la cabeza—, ahora estoy cansado, ¿mañana?
Ella cierra fuertemente los ojos no sé si intentando no hacer nada que la deje en ridículo o qué y asiente con la cabeza, rendida. Hala, ya me he quedado sin clases de surf por la mañana porque la furcia de Sarah tiene que ir siempre primera.
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More Than A Travel (Nash Grier)
FanficCuántas veces soñé cómo sería mi vida al lado de Nash. La vida sería tan perfecta como él. El problema es que sólo estaba soñando.