25

57 6 3
                                        

Dios, dios. No podía estar más inquieto.
Después de aquella conversación que tuve esa noche con Jungkook, todo estaba saliendo mal. No podía creerlo.

Recopilando un poco el tema, más o menos esto fue lo que ambos estuvimos charlando.

*-*

- Jimin, necesito hablar de algo importante contigo. - comenta Jungkook ingresando a la cocina.

En el momento en que lo oí, me volví hacia él para encararlo de frente sin dejar de soltar mi vaso con cerveza.

- Dime Jeon, qué es lo que me tienes que decir. -

- Sé de tu relación con Jennie. -

Jamás pensé que las palabras que escucharía a continuación me dejaran tan perplejo. Fue como si me lanzara un balde de agua fría, volviéndome a la realidad.

El trago que iba recorriendo por mi garganta se fue por el lugar equivocado, lo que me provocó toser desesperado por conseguir el aire. Jungkook se acercó más a mí, sin apartar su mirada. Estaba jodido.
Y ahora más que nunca, no supe que decir.

- Escucha, yo no pretendía oír lo que ambos se decían. Pero en el momento en que tú le reclamabas a ella como si fueses su novio, no fue muy difícil adivinar lo que ambos se traían. - Jungkook se repasa las manos por el cabello exasperado mientras recarga su cuerpo contra el mesón.

Mi vaso ya no me apetece, por lo que lo dejo sobre el fregadero. Ahora soy yo quien se repasa las manos por el cabello echándolo hacia atrás repetidas veces. Mi acto desesperado por no saber que hacer me estaba alterando, hasta el punto en que sentí unas irremediables sensaciones de llorar. Sentía impotencia de querer hacer mucho, pero a la vez nada.
Sentía dolor por todo lo que estaba pasándome. Jungkook era mi mejor amigo, y a él, no le podía mentir. Él es al único al cual yo puedo contarle todo. Era el único que podría saber la verdad, ya que sabía de primera, que a pesar de todo, él no me expondrá. Pero sí sabía que este mocoso me exigiría alejarme de ella y eso era lo que menos quería. Sin embargo, a él es al único que le puedo obedecer por así decirlo. Sus consejos eran lo más valioso que podría oír. Y no es que Taehyung sea un bocazas, pero en este momento me convenía contarle todo a Jungkook ya que sabría cómo ayudarme.

- Jungkook, sé que no he sido una buena persona. He actuado de la manera más horrible posible. Pero te juro, te juro, que esto es algo muy fuerte. - asiente.

Oímos las risas desde el otro lado de la habitación por lo que nos alejamos hacia el patio para seguir con el tema. Nadie más que él podría saberlo. Con Jungkook ya era suficiente.

- Escucha, sé que he sido un mal amigo al fijarme en la novia de Yoongi. Pero ha sido inevitable, no lo he podido controlar. Debes saber que lo que siento por ella, es algo que me es difícil de explicar. Al principio me convencía de que estaba mal, me castigaba a mí mismo por mirarla de otra manera que no debía. Y en cuanto Yoongi me pidió el favor de cuidar de ella, me aproveché de la situación. - cierro mis ojos al recordar aquellos maravillosos momentos.

Siempre que me ponía a pensar en cómo había iniciado todo, me sentía flotar sobre las nubes. Así es como realmente Jennie me hacía sentir. Estar con ella era todo lo que necesitaba para seguir viviendo. Continuar con mi vida olvidando todo. Después de conocerla a ella, todos mis días grises desaparecieron. Ya no tenía que preocuparme por nada. Siquiera necesitaba tener el trabajo con Minhyuk para sostener mi vida. Tampoco necesita el de los chicos, para que por lo menos me hiciese una mejor persona.
Yo sabía que estando ella a mi lado, no necesitaba de nada. Jennie me complementaba totalmente. Gracias a ella es que pude cambiar. Y volver a vivir.

Cuando terminé de contarle toda la historia a Jungkook, este seguía sin decir nada y me comenzaba a preocupar lo que me fuera a decir.

- Sabes Jimin, tú debes hacer lo correcto. Eres mi amigo, como también lo es Yoongi. - se mordió los labios sin soltarlos. Prosiguió. - Y creo que es momento de que lo superes, ya que ellos están comprometidos. Hazlo por el bien de todos. Debes dejarla ir. -

El que queda sin palabras soy yo. Mi boca se abre en una perfecta O. No me sorprende, conozco tan perfectamente bien a Jungkook, como para atreverme a decir que sea lo que sea que esté pasando, él siempre se verá por lo bueno. Es el chico más correcto que he conocido en mi vida, y me molestaba aceptar la verdad.
Pero algo dentro de mí se niega en aceptarlo, por lo que no me tiembla la voz en llevarle la contraria.

- ¡¿Crees que no lo he intentado?!. -

Me levanto enfurecido maldiciendo. Camino de allá para acá, casi que en círculos frente a él.

- Maldita sea Jungkook, no sabes todo lo que he intentado para alejarme de ella. Para olvidarla.. La he dejado tantas veces, pero siempre vuelvo a ella. Es como imán, me atrae fácilmente. - me tomo de los cabellos frustrado.

Vuelvo a sentarme a su lado en los escalones, y me sincero con él.

- Ha sido tan duro para mí, que ya no sé que más debo hacer. Me decidí a conocer a Rosé porque creí que ella me haría olvidar de Jennie, pero no ha sido así. A pesar de que me encanta tener su compañía y estar junto a ella, no logro sacarla de mi cabeza. Me tiene tan malditamemte atrapado. - lo miro a los ojos, y una lágrima recorre mi mejilla. - Jungkook, tú me conoces mejor que nadie. - alzo una de mis delgadas cejas y él asiente. - Y sabes, que yo jamás dejo lo que quiero, así que por favor no me digas ahora que no continúe, porque sabes que no lo haré. Sabes que a pesar de todo, no me rendiré tan fácilmente. -

- Pero Jimin, ellos van a casarse. - insiste levantándose.

Comenzamos una discusión entre ambos.

- Eso no me detiene. -

Pero entonces las cosas se ponen más difíciles cuando una tercera persona interviene en el tema. Jamás pensé que él diría eso.

- Pero yo si lo haré. - Nam Joon.

Jungkook y yo nos volteamos a mirar de donde es que había salido, y lo descubrimos detrás de la pared por la puerta principal. Se acerca a paso firme hacia a nosotros encarándonos.

- Jungkook tiene razón, debes alejarte de Jennie. -

Y ahí es cuando los demás chicos también se unen. Era una especie de todos en mi contra y eso no me gustó.
Solo faltaba que se uniera Yoongi a la situación y el problema explotaría. Por suerte no fue así, en cuando Taehyung mencionó que él estaba en la habitación de arriba descansando con Jennie.
Pensar aquello no me gustó, por lo que estaba decidido en ingresar a la casa e ir a por ella para llevarla lejos de aquí. Hubiese sido así, de no ser por Jin quien me detuvo tomando mi brazo fuertemente.

- No lo hagas, Jimin. - exigió.

Y como si sus palabras hicieran el mayor efecto en mí, caí de rodillas frente a él mientras que las lágrimas se escabullen de mis orbes. Me había derrumbado.
Entre los chicos me convencieron, y me hicieron entender todo. Sus palabras de apoyo hacia mí, la familiaridad que había entre todos. No podía más. Lloré frente a todos ellos demostrando lo débil que estaba. Lo destrozado e impotente que me sentía.

Y de tanto desahogo que tuve, quedé completamente insconciente. No supe de lo que pasó después, y solo sentí cómo cargaban con mi cuerpo llevándome a quizás quien sabe dónde.

Pero a pesar de que no estaba consciente, solo una idea permanecía intacta en mi cabeza.

Yo jamás voy a dejar a Jennie Kim. Si era necesario pasar por encima de Yoongi, no me importará hacerlo con tal de tenerla.

Y eso, nadie lo iba a impedir.














































































































Ya no me quedan uñas de lo mordida que me las dejo por todo el drama que hay aquí... Díganme que no soy la única. 😂💔

Por otra parte, quiero avisarles que estaré publicando seguido ya que por la cuarentena en mi país, me he dedicado como nunca a escribir. La inspiración por si sola.
Y bueno, eso, así que no se vayan porque esto comienza a ponerse bueno. 😉

{Voten&Comenten} 🍑

FIRST LOVE {YOONNIE} +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora