La Hija De Shane [Carl Grimes y tu](The Walking Dead) *EDITANDO*

Uno: Los días pasan

[Cuatro meses antes del apocalipsis]

Todos vestían de negro y lloraban fuertemente mientras la caja en la que mi madre se encontraba era enterrada, el poco aire arrastraba las intensas olas de calor y los rayos de sol parecían atravesar las sombrillas sobre nosotros. Ninguna nube o sombra cercana que pudiera aliviar el triste momento y cada segundo que pasaba mi mente solo podía concentrarse en las ultimas palabras de mi madre antes de ser hospitalizada.

Flashback

Mamá: ¿En que momento creciste tanto? - pregunto extendiendo su mano hacia mi para acomodar un mechón de mi cabello revoltoso y sucio por la tierra con la que antes había jugado detrás de mi oreja - Mi niña - me miro fijamente notando la tierra que también había en mi cara, pero en esta ocasión parecía no importarle, estaba tan calmada que incluso podía pensar que ya no le molestaba que jugara en el patio y con el lodo

No recordaba una ocasión en la que ella no me gritara y regañara por jugar con bichos, por trepar arboles o hacer castillos de tierra, pidiendo que entrara a la casa lo antes posible y que me dirigiera al baño para darme una rápida ducha. El enojo no desaparecía en ella hasta que estuviera bañada y la comida servida en la mesa, cuando nos juntábamos para comer en silencio, pues sabia que dejaba de estar enojada cuando al final de cada comida un postre aparecía junto con ella, aun cuando ni una sonrisa o una mirada cálida estaba en su rostro, podía deducir que ya no me odiaba.

Mamá: Necesitas un baño - hablo acariciando mi rostro y sonriendo feliz, lo que me llegaba a angustian pues no quería creer que estaba disimulando su enojo conmigo por algo mas que hubiera hecho, aunque no recordaba haber hecho algo aun peor - Pero por ahora ¿Que tal si te acuestas junto conmigo? - pregunto recorriéndose en su cama para hacerme un espacio, extendiendo sus brazos para indicarme que me acostara con ella y que la abrazara, pero me quede parada - Jane - me llamo haciendo que la mirara aunque mi atención estaba en su piel amarilla y el temblor de sus manos por intentar mantenerlas extendidas - Jane, ven con mamá - insistió por lo que levante la cabeza, mirando a sus grandes ojeras y el poco cabello que le quedaba - Jane.- intento tomarme del brazo para hacerme reaccionar del extraño miedo que ahora le tenia por verla de esa forma, por haber reaccionado y notar que ya no era la de antes, la de antes de la enfermedad 

Al instante en que su mano toco mi brazo no pude evitar alejarme y mirarla con tristeza y temor, viendo como su rostro cambiaba y sus brazos se ocultaban por saber perfectamente lo que sentía, aunque quería acercarme, abrazarla y hablar con ella como era antes, no podía moverme y hacerlo, mi cuerpo estaba paralizado por no saber como actuar frente a ella. 

Fin del Flashback

Tía Isa: ¡Jane! - el grito me hizo regresar a la realidad para levantar la cabeza y ver como me miraba a lo lejos, tan confundida como era posible pero al parecer molesta de que no estuviera viendo lo que pasaba - Deja de ensuciarte los zapatos y despídete de tu madre.- camino hacia donde me encontraba para ponerse de cuclillas y dar un par de sacudidas a mis zapatos llenos de tierra, luego me tomo del brazo y me levanto con rapidez para llevarme hasta donde el profundo hoyo seguía siendo llenado 

Jane: No quiero hacerlo.- negué para soltarme de su agarre, pues no quería avanzar mas ni ver los últimos momentos de mi madre, no quería tener el recuerdo de su entierro o algo relacionado con ello, entonces me gire y corrí en dirección contraria a la multitud que había venido a despedir a mamá

Tía Isa: ¡Jane!.- la escuche pero solo seguí corriendo en busca del árbol mas alto que pudiera encontrar, trepándolo y quedándome ahí para olvidar lo que sucedía, esperando a que terminara pronto 

°°°

Tía Isa: Déjenla - escuche su voz, la que regañaba a sus hijos por estar lanzando piedras hacia donde estaba, pues habían intentando bajarme ya que ellos no pudieron subir conmigo, aunque lo primero que se les ocurrió fue lanzar piedras, pero pude deducir que después de los primeros 5 minutos lo hacían por diversión - Baja de ahí, tenemos que irnos.- me ordeno mientras tomaba a uno de sus cinco hijos del hombro y lo apartaba del árbol en el que me encontraba