Sentía todo tipo de cosas ya que Evan y Nath vendrían a mi apartamento a cocinar. Me sentía emocionado y nervioso a la vez.
Aliste todos los ingredientes como huevos, harina, polvo para hornear, mantequilla y otras cosas más.
—Será fantástico.
Tenía que esperar una hora para que ellos vinieran a mi apartamento, así que comencé a buscar algo que hacer para calmar mis nervios.
Vi algunas fotografías de cuando era más joven, me llene un poco de nostalgia y una pequeña lágrima salió.—Cuanto he crecido y he aprendido, desearía volver al pasado y disfrutar al máximo esos bellos momento con mis amigos y con mi madre.
Tomé una de las fotografías donde estába Nathaniel y yo para mi cumpleaños número dieciséis y verlo me hizo sentir un poco culpable.
—Yo debí estar con mi mejor amigo y no dejarlo. Si tan sólo pidiera volver al pasado...
—Aún tienes oportunidad Adrien.
—¿Quien dijo eso? —Pregunté algo asustado.
—Soy yo, el muñeco de nieve.
Escuche una voz chillona.
—¿Puedes hablar? Debo estar loco, muy loco. —Toqué mi cabeza, creo que ya estaba alucinando.
—No seas tonto, claro que no puedo hablar, es sólo tu imaginación o tu conciencia. Te preocupas demasiado Adrien pero trata de calmarte y dejar que las cosas pasen y que el destino defina lo que quiere para ti.
—Tienes razón muñeco de nieve, me preocupo demasiado pensando en que si cometo algún error todo se irá al demonio. —Me acerqué para poder ver la bola de cristal con el muñeco de nieve.
—Ahora ve a abrir la puerta, el amor de tu vida está afuera con tu futuro hijo.
—TOC TOC
No me di cuenta que me había quedado dormido mientras veía las fotografías. Después de todo el muñeco de nieve tenía razón; me preocupo demasiado.
Guardé las fotografías y las deje en la caja donde estaban. Fui a abrir la puerta.—Hola chicos, pasen. —dije mientras abría la puerta.
—Hola Adrien, estabas dormido ¿verdad? —dijo Nath con esa calidad sonrisa.
—Sí, me quedé dormido por un rato pero ya estoy en la tierra.
—Papá son las 5:30 y ya va a comenzar Phineas y Ferb, Adrien ¿podría usar tu tele? —Preguntó mientras hacía un adorable puchero. Y no pude negarme.
—Evan...—dijo Nathaniel apenado.
—Por supuesto, puedes ver Phineas y Ferb en mi televisión. De hecho a mi también me gusta verlo aveces.
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Adopt my love [ADRINATH] Edición
Hayran Kurgu¿Alguna vez te has sentido solo? Sentirse solo, es un sentimiento que te hace pensar que no eres importante para otras personas, un sentimiento el cuál te hace sentir en el olvido; estar solo hace que tu propia mente explote y te haga sentir nostal...