*Tres semanas después*
NARRA BETHANY
Por fin había acabado las clases intensivas de brujería con mi madre. Ahora podía seguir con mi vida normal, solo que practicaba con ella los lunes, jueves y domingos.
Hoy era sábado y había decidido quedar con las chicas. Me estaba preparando para irme. Me puse una sudadera amarilla y unos vaqueros largos. Me recogí el cabello en mi típico moño y me puse mis Converse. Bajé y se lo comuniqué a Jonny. Sus ojos brillaron cuando pronuncié el nombre de Jessie, pero le dije que Charlotte venía a buscarme porque vivía más cerca nuestra y le quedaba de paso hasta el Sweet Caramel.
—Bueno, pues salúdala de mi parte.
—Vale.
El sonido de bocina me avisó de que Charly ya estaba fuera. Cogí mi móvil, mis llaves y mi monedero y lo metí en los bolsillos. Salí, la saludé con un beso en la mejilla y me senté en el asiento de acompañante.
—¿Qué hay?
—Nada interesante, la verdad —dijo mientras arrancaba.
La miré. Mi madre me había enseñado a diferenciar brujas y hombres-lobo. El aura de Charlotte era diferente al de un humano. Ya me había dado cuenta de eso tiempo atrás, pero nunca había tenido oportunidad de hablar con ella a solas.
—Charlotte, a lo mejor me tomas por una loca, o a lo mejor me lo confirmas, pero necesito hacerte una pregunta.
—Me das miedo —sonrió—. Adelante.
—¿Eres una bruja?
—¡¿Qué?! —exclamó pegando un frenazo.
El coche de atrás comenzó a pitarnos, por lo que le lancé un besito.
—Arranca. El de atrás es gilipollas.
—L-lo siento, es que la pregunta me pilló por sorpresa. Tú también lo eres, ¿verdad? Tu aura es diferente.
—Sí, la tuya tampoco es normal. No es tan intensa como la de un hombre-lobo, pero sí lo suficiente para hacerme dudar. Supongo que el pelo rojo me ayudó en eso.
Charly soltó una carcajada.
—Siempre dicen que las pelirrojas somos brujas. A veces pienso que tienen razón.
—Y... ¿has descubierto a otra bruja o a algún hombre-lobo?
—Me he dado cuenta de que Holly no es lo que aparenta ser, al igual que Christian.
—¿Holly? Nunca he prestado atención a su aura —intenté alejarla del tema de Christian y funcionó.
—Es muy débil. Casi parece humana, pero seguro que algo de sangre lobuna tiene recorriendo sus venas y arterias.
—¿Podría ser... que algún antepasado suyo fuese un hombre-lobo?
—Podría ser.
—Y, yéndonos del tema, ¿qué tal con Leo?
—No sé. Todo está mal. No concordamos en muchas cosas y peleamos todo el rato. Pensaba que me gustaba, pero me estoy dando cuenta de que no es así.
—¿Puedes hablar con él mentalmente?
—¿Qué? ¿Eso se puede hacer?
—Me lo tomaré como un no. Lamento decirte, Charly, que no estáis destinados a estar juntos. Ya encontrarás a tu media naranja. Por el momento tienes que soportar al kiwi.
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Muérete, amor [CORRIGIENDO]
Manusia Serigala«-Bueno, ahora te vas a dar la vuelta, mirando hacia la ventana, mientras yo me pongo el pijama. -No hace falta. A mí no me importa que te desnudes delante mía. -Estoy segura de eso, pero a mí sí me importa, por lo que te vas a dar la vuelta...