Capítulo 42

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Se puede adivinar lo que hice luego, después de todo estoy sola; las aldeas me reconocen y me cazan mientras que Akatsuki me consideran una "traidora" no puedo volver con ellos, estoy sola.

En otras palabras, toqué fondo.

Una advertencia antes hubiera estado bien pero yo no me quito de culpa, pendeja también yo que no leí las cláusulas del contrato.

¿Cómo no lo vi venir?

Ahora vivo en las montañas, alejada de todo el mundo. Si la 4ta Gran Guerra Ninja ya empezó o iba a empezar a mi no me molestarían la tronadera de "cuetes" y sus mamadas.

Protejo la cueva donde duerme Itachi, él es el único que me queda y no lo iba a perder, él y el alcohol.

Embriagándome todos los días, he llegado a perder la noción del tiempo a la vez que pierdo la cabeza sumergida dentro de las botellas.

Trago tras trago hasta que el licor me deja inconsciente y cuando despierto, vuelvo a beber.

-Está es la nueva yo y me gusta-.

Trataba de convencerme a mi misma.

Allí estaba otro día, sentada afuera de la cueva junto a un mar de botellas ya vacías.

-¿Cuánto llevas así?-.

Me pregunta Itachi sentado a mi lado, con su capa negra con roja y sus ojos obscuros justo como me gustaba recordarlo.

-Err, ¿unos días? Creo, tal vez semanas, no lo sé y no me importa-.
Respondí.

-No bebas tanto-.

-Me gusta beber mucho, tengo la esperanza de que me despierte un día sin recordar, nada y a nadie, la perdida de tiempo de los últimos años...-.

-Hasta que el hígado aguante...-.
Itachi parecía decidido a seguir hablando.
-¿Por qué no vas a...?-.

-¿A la guerra? ¡Ja! ¡Si claro!-.
Lo interrumpí con sarcasmo.
-En la guerra solo hay muerte y perdida, no soy pendeja, no me voy a meter en lo que no me importa-.

-Esa no eres tú, Alice-.

-¿Bueno y que hay de ti? No eres real, solo eres una alucinación que mi cabeza creó para no desbordarme hacía la locura-.

-¿No estás ya en ella?-.

Me hizo reír:
-Muy gracioso, hasta en mi mente eres sarcástico, bien jugado-.

Ya me he terminado las botellas, la resaca estaba comenzando a hacer efecto, necesito ir por más y está vez me aseguraría de tener las suficientes para un puto año entero.

-Ya no hay licor, iré por más-.
Me levantaba torpemente del suelo.

-Sabes que es una mala idea-.

-Y tú, estás casi muerto, al final no me dices nada que yo no sepa-.

-Tal vez no pero si puede aclarar tus pensamientos-.
Itachi toma mi hombro.

-¿No tienes otra cosa que hacer?-.

Aparto su agarre:

-Ya no quiero hablar contigo, desaparece. Iré a buscar más...-.

Me tambaleaba en mi lugar. Itachi trato de volver a ayudarme pero lo aparte con mi ala.

-¡No eres real! No puedes ayudarme, solo vete...-.

Demonio En AkatsukiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora