La Base Starkiller: Parte 2

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-¡Ben!- Gritó Han a la figura encapuchada. Al escuchar ese nombre sentí que mi corazón se detenía y que mis piernas se volvían débiles... No podía ser cierto

-"Sí niña. La verdad por fin está siendo revelada"-La horrenda voz sonó una vez más en mi cabeza provocándome un sentimiento de angustia infinito. Era como estar ahogándose

-Han Solo, he estado esperando este día por mucho tiempo- Una voz robótica fue emitida de la figura enmascarada... Pero a pesar del robótico tono, pude darme cuenta de que era verdad, todo lo que la presencia había dicho era verdad

-Quítate esa máscara. No la necesitas- Espetó Han, enojado

-¿Qué crees que verás si lo hago?- Respondió la imponente figura retándolo

-La cara de mi hijo...- Acto siguiente la figura se desprendió de dicha prenda. Grandes lágrimas comenzaron a resbalar por mis mejillas al tiempo que mi corazón comenzó a palpitar como si se me fuese a salir del pecho. A unos pocos metros frente a mí, se encontraba Ben Solo en carne y hueso. Pero a pesar de poseer todos los rasgos distintivos que lo hacían ser él, parecía drásticamente diferente. Su rostro no mostraba emoción alguna y su cuerpo estaba tenso y rígido ante la figura de Han. Sus manos se encontraban hechas un puño, y en una de ellas portaba un sable láser.

Pude sentir como mi fuerza se salía de control, y comencé a forcejear con mi opresor, quién se las estaba viendo muy difíciles para mantenerme a raya.

-"Deja de pelear niña tonta, de nada te servirá. ¡Observa en qué se ha convertido tu amigo!- Posé de nuevo mis ojos en la escena en una tortura que parecía no tener fin, desesperada por no poder ir, por no poder acercarme a ellos.

-Tu hijo ya no está. Él era débil y tonto, como su padre. Así que lo destruí – Mis oídos no daban crédito a lo que escuchaban, y mis ojos querían apartar la vista de la figura de Ben. Era como vivirlo todo otra vez, era como volver a vivir ese horrible momento en donde Anakin dejo todo atrás. ¿Era que todos los Skywalker estaban destinados a sufrir de alguna manera?. Mis lágrimas comenzaron a caer en el piso y mi necesidad de ir y sostener las manos de Ben era cada vez más fuerte. Él no podía haber caído al lado oscuro, no podía, y yo no lo iba a permitir.

Continúe forcejeando con más fuerza con la voz, y él de nuevo aumento el agarre, estaba segura de que si seguía insistiendo él terminaría más que exhausto, así que no me rendí. Mientras mi padre estaba luchando por recuperar a Ben yo misma me encontraba en la oscuridad luchando por recuperar el control de mi cuerpo.

-Eso es lo que Snoke quiere que creas pero no es verdad. Mi hijo está vivo- "Snoke". Esa palabra me llegó a la cabeza y pude adivinar por fin algo acerca del ente misterioso que parecía tener control sobre mi

-"Snoke"- Repetí mentalmente- Ahora ya se el nombre del ser que será degollado con mi arma- El enojo comenzó a correr desenfrenado por mi cuerpo, la ira comenzó a darme fuerza para liberarme de la restricción del ser. Y de hecho funcionó. La presencia retrocedió un poco, dejándome mover débilmente las piernas

-"Eres interesante niña, a pesar de que el odio y el enojo corren por tu cuerpo, tu voluntad no se ve influenciada por el lado oscuro... Creo que mis planes acaban de cambiar para ti..."- De nuevo Snoke volvió a volcar una cantidad enorme de fuerza sobre mi, haciéndome difícil respirar.

-No. El Líder Supremo es sabio- Apuntó Ben amenazante, pero a pesar de esto Han, lejos de retirarse se movió lentamente hasta él, como si de un animal desconfiado se tratara.

-Snoke te está usando por tu poder. Cuándo el obtenga lo que necesita, te hará pedazos. Sabes que es verdad- Han habló decidido mirando directamente a los ojos a Ben.

-Es demasiado tarde- Una voz triste salió de la garganta del pelinegro.

-No, no lo es. Deja este lugar conmigo y vuelve a casa. Te extrañamos- En ese momento pude sentir como Ben se sintió conflictuado. Pude ver cómo algunas lágrimas se formaban en sus ojos y eso fue lo que me animó a empujar más fuerte la presencia de Snoke...

-Estoy siendo destrozado. Quiero liberarme de este dolor.- Una genuina mirada se apoderó del rostro de mi amigo- Se lo que tengo que hacer, pero no sé si tengo la fuerza para hacerlo. ¿Me ayudarías?- La propia voz de Ben hizo que Han y yo nos llenáramos de esperanza. Aún había luz en Ben Solo

-"Niña tonta..."- Snoke parecía no rendirse, y yo tampoco lo haría.

-Sí, lo que sea- Mi padre se acercó a la figura de su hijo y una atmósfera oscura llenó el lugar a medida que Ben le entregaba su sable a Han

-"!Ha ha ha!"- Una estruendosa y maligna carcajada de Snoke me hizo dar un pequeño brinco. Mis ojos se posaron de nuevo en la escena pero esta vez se llenaron de horror. Los ojos de Ben habían cambiado.

Una fuerza siniestra se sintió en el ambiente y todo comenzó a suceder demasiado rápido. Ben encendió su haz carmesí sobre el pecho de Han perforándolo justo en el corazón... En su último aliento mi padre acarició la mejilla de su hijo y después, perdiendo toda la vida que le quedaba, su cuerpo cayó inerte al vacío de la estructura. Ben se arrodilló a recoger algo que su padre había tirado en la plataforma antes de caer y su mirada se ensombreció.

En ese momento algo dentro de mí se comenzó a agitar desde mis entrañas. Mi corazón latía desbocado, mi sangre hervía y la fuerza comenzó a fluir de manera desenfrenada por mi cuerpo

-¡NO!- Un grito gutural salió de mi garganta liberándome demasiado tarde del agarre de Snoke. Ben, quién no se había percatado hasta ese momento de mi presencia, posó sus ojos sobre mi y una mirada de genuino pánico cruzó su rostro. Él se distrajo y Chewie soltando un alarido de dolor atinó a dispararle sin piedad. En ese momento todos los Stormtrooper que rondaban el área comenzaron a dispararnos a todos. Yo encendí mi arma y de nuevo comencé a desviar los rayos, utilizando mi fuerza en una manera desmedida para deshacerme uno a uno de los soldados de asalto mientras mis amigos lograban escapar. Ben se apresuró a alejarse del lugar en busca de Finn y Rey

En ese momento no sentía compasión alguna, y cuándo finalmente hube masacrado a todos y cada uno de los soldados, me dirigí hacia donde la energía me llamaba, no sin antes emitir un furioso mensaje.

-Ahora que ya se quién eres y qué es lo que has hecho, no descansaré hasta matarte. Te espera un final doloroso y ruin, y quiero que sepas que al no ser una Jedi no tendré la más mínima compasión por ti, te masacraré y mi rostro será lo último que veas antes de morir...- Cualquier usuario sensitivo a la fuerza pudo haber escuchado dicho mensaje y fue ahí cuando comprendí que si quería alcanzar mis fines, no tenía que seguir las estúpidas reglas de los Jedi ni las erróneas estrategias de los Sith, simplemente debía dejarme llevar por mi juicio y mi fuerza, ambos en conjunción para así cumplir mis objetivos.

La Profecía de la Fuerza (KyloRenxReader) (HuxxReader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora